El Juzgado Noveno de Instrucción de San Salvador aceptó el acuerdo entre la defensa del ex Presidente Elías Antonio Saca y la Fiscalía General de la República (FGR), de confesar que cometió el delito de cohecho, a cambio de favorecerse con una condena de dos años de prisión.
Según detalla la acusación, Saca pagó $10,000 a una empleada de la Cámara Primera de lo Civil de San Salvador, para que le entregara información relativa a su caso por enriquecimiento ilícito –del cual también ya fue condenado- que se ventilaba en la instancia por un monto de 3 millones 970 dólares.
La semana pasada el ex mandatario confesó los delitos, sin embargo, la diligencia se tuvo que reprogramar porque los audios que presentaron los fiscales, en los cuáles confirmaban lo relatado por Saca, no fueron reproducidos por problemas técnicos.
Este es el segundo delito que confiesa el ex mandatario, el primero fue por Peculado, en el que recibió una pena de 10 años de cárcel.
Saca, negoció dos años de cárcel y será el respectivo Juzgado de Vigilancia Penitenciaria y Ejecución de la Pena de San Salvador el que decidirá jurídicamente si los dos años se suman a los diez años de cárcel que ya enfrenta por otra condena, o si se considera como parte de la pena la fecha desde la cual inició el proceso.
Por su parte la Fiscal del caso indicó que no es admisible la solicitud de la defensa de desvanecer los dos años de cárcel por un cumplimiento previo.
Antecedentes del Caso Transes
En diciembre de 2018 la jueza Nora Montoya condenó a dos ex empleadas del órgano judicial en procedimiento abreviado pactado previamente entre la FGR y la defensa de Ángela Irasema Avelar Salinas y Elsa Coralia Ramírez, ellas admitieron los hechos y fueron condenadas a dos años de cárcel por los delitos de cohecho propio y prevaricato, respectivamente, no obstante la prisión fue reemplazada por trabajo de utilidad pública el cual será controlado por un Juzgado de Vigilancia Penitenciaria.