Los miembros del FMLN no vieron con buenos ojos que policías y soldados fuertemente armados ocuparon brevemente el edificio de la Asamblea Legislativa, el domingo en una demostración que buscaba la aprobación del préstamo de 109 millones para seguridad.
Las Fuerzas Armadas y las tropas de la Policía Nacional Civil (PNC), con rifles y vestidos con uniformes de combate y equipo táctico, entraron al edificio después de que el presidente Nayib Bukele no consiguió convocar a toda la legislatura para autorizar el empréstito.
Para el Secretario General del partido de izquierda Óscar Ortíz, la acción fue “un autogolpe de estado” y no puede pasar desapercibido “porque si el país y nosotros lo permitimos dejamos abiertas las puertas para que cualquier ladrón se vuelva a meter a la casa del pueblo, y no se vale”, cuestionó.
La actitud del Presidente fue un acto de “matonería”, aseguró Ortíz. Sobre la nueva convocatoria del domingo que Bukele anunció, el dirigente dijo que “espero que llegue, ojalá que sin militares. Vamos a considerar ir el domingo a la Asamblea, vamos a ver de quien son las mulas”.
Con estas declaraciones Ortíz descartó que el partido de izquierda de sus votos para la autorización del préstamo del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
Ortíz anunció que harán un análisis “de todo el daño que se le ha hecho a la Asamblea, para hacer las demandas de tipo político y legal”. Reveló que una de ellas será la interpelación del Ministro de la Defensa, Francis Merino Monroy, que autorizó a los soldados a ingresar al parlamento, armados. Mismo sentido para el Director de la PNC, Mauricio Arriaza Chicas.
“Ya nos hemos enfrentado con matones, con fusiles, nosotros por la democracia estamos dispuestos a resistir lo que sea; pero dictadores, no los vamos a tolerar”, sentenció.