El Tribunal Tercero de Sentencia de San Salvador absolvió a cinco policías y condenó a Jorge Molina, Moisés Pérez y Oscar Escalante, a tres años de cárcel con el beneficio de la suspensión condicional del procedimiento, mientras cumplan con las reglas impuestas.
Asimismo absolvió a dos reos que eran procesados en estos mismos hechos.
Las reglas son: no salir del país, presentarse a firma al juzgado, no usar bebidas alcohólicas, además les impuso una pena accesoria de la pérdida del cargo de empleado público, mientras se cumpla el mismo periodo de la pena.
El juez manifestó que el testigo solo hizo mención sobre la participación y las actividades que realizaban los tres condenados, en cuanto a los demás no individualizo a nadie, por lo tanto, bajo la duda no podía imponer ninguna pena.
En el desarrollo de la vista pública se recibió la prueba testimonial de tres testigos de cargo y tres de descargo, entre los testigos está la declaración de clave “Dante”, quien es criteriado, el cual manifestó, de acuerdo al interrogatorio, la forma en la que ingresaban los objetos.
Los ahora condenados ingresaban a las bartolinas de la Unidad de Servicios Extraordinarios conocido como: el Penalito o la Naval, ilícitos como: teléfonos, cargadores para teléfono y drogas.
La forma de operar era que los reos se reportaban enfermos y al sacarlos y luego regresarlos a la celda, ya portaban los ilícitos.
De esa forma cobraban entre 400 y 800 dólares, según el testigo.