El Ministerio Público (MP) de Guatemala desmintió que hay una investigación abierta contra el ex presidente Mauricio Funes, quien fue señalado de supuestamente lavar $1,200 millones del erario salvadoreño.
La información fue corroborada esta tarde, horas después que el Secretario de Prensa de la Presidencia, Ernesto Sanabria, publicara un informe del MP con los sellos y distintivos de la institución fiscal guatemalteca.
Sanabria escribió: «El prófugo @FunesCartagena sacó $100 millones mensuales durante un año de El Salvador hacia Guatemala, para ser lavados por Jonathan Harry Chévez y otro mercenario ahora preso por narcotráfico en Estados Unidos. Estos $1,200 millones han sido embargados en cuentas estadounidenses».
El funcionario acompañó su tuit con cuatro fotos, que ilustran ese documento, el cual aparece con algunos datos tachados.
El MP hizo unas declaraciones a medios de prensa en donde se refería a que “no existe registro sobre alguna denuncia o investigación abierta en contra de esta persona», señalando a Funes.
Entre las inconsistencias de los datos, se encuentra el número de la denuncia: 09702018; esta no responde a ningún caso abierto por parte de la institución.
Además que hay definiciones que no son utilizadas en la jerga judicial de aquel país, como el término “testigo criteriado”. Cuando la justicia maneja a los testigos con un número denominativo.
Para corroborar el documento, el MP ha remitido a la Oficina de Atención Permanente de la institución para que dé apertura a una investigación para determinar si el documento en poder de Sanabria es verdadero.
En los documentos que publicó Sanabria, establece que Funes, movió varios millones cuando era Presidente, con rumbo a Guatemala para después, por medio de sociedades offshore, lo introduciría al sistema financiero estadounidense. En los documentos también indican que lo habría hecho de la mano de un hombre, procesado por la judicatura guatemalteca de lavado de dinero y activos en torno al caso conocido como La Línea, que involucra al ex presidente Otto Pérez Molina y varios de sus exfuncionarios.