Ranfleros de la MS en El Salvador serán requeridos en Estados Unidos por diversos delitos

FOTO. EL FARO
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Catorce líderes de la pandilla MS han sido acusados por un tribunal del Distrito de Central Islip, en Nueva York, Estados Unidos, de conspiración para prestar y ocultar apoyo material a terroristas.

El jueves se emitió la resolución judicial en la cual se imputarán de delitos a los pandilleros salvadoreños:

  • Borromeo Enrique Henríquez, alias “Diablito de Hollywood”.
  • Elmer Canales Rivera “Crook de Hollywood”.
  • Fredy Iván Jandres-Parada “Lucky de Park View”.
  • Saúl Antonio Turcios “Trece de Teclas”.
  • Arístides Dionisio Umanzor “Sirra de Teclas”.
  • Leonel Alexander Leonardo “El Necio de San Cocos”.
  • Ricardo Alberto Díaz “Mousey de Leewards”.
  • Cesar Humberto López-Larios “el greñas de Stoners”.
  • José Luis Mendoza Figueroa “Pavas de 7-11”.
  • Hugo Armando Quinteros-Mineros “Flaco de Francis”.

Asimismo serán acusados Eduardo Erazo-Nolasco “Colocho de Western”; Edson Sachary Eufemia “Speedy de Park View” (ambos de origen guatemalteco) y Joe Fernandez Flores-Cubas “Cola de Western” y Efraín Cortez “Vista Tigre de Parque”, ambos de nacionalidad hondureña.

Si bien los diez pandilleros salvadoreños están recluidos en la red penitenciaria del país, la Embajada de los Estados Unidos dejó entrever en un comunicado que podrían ser extraditados a suelo norteamericano para ser procesados.

El fiscal general en funciones Jeffrey A. Rosen dijo este jueves que la acusación “es la más amplia y de mayor alcance que se ha hecho en los Estados Unidos contra la MS”, además recordó que la oficina ha trabajado con el ministerio público salvadoreño para identificar crímenes de alcance transnacional.

“Incluso desde la cárcel, la Ranfla Nacional continuó dirigiendo las operaciones globales de la MS-13, reclutando nuevos miembros en la MS-13, incluyendo niños, y orquestando asesinatos y caos en todo el mundo. La innovadora acusación de hoy busca demoler la MS-13 apuntando a su estructura de mando y control y haciendo responsable a la Junta Directiva de la MS-13 por sus acciones terroristas”, aseveró Seth D. DuCharme, fiscal en funciones del Distrito Este de Nueva York (EDNY).

Según el acta presentada, se les acusa de conspiración para prestar y ocultar apoyo material a terroristas, conspiración para cometer actos de terrorismo que trascienden las fronteras nacionales, conspiración para financiar el terrorismo y conspiración de narcoterrorismo en relación con la dirección de los acusados de la organización delictiva transnacional durante las últimas dos décadas en El Salvador, Estados Unidos, México y otros lugares.

El informe recoge investigaciones sobre actos de violencia y asesinato en El Salvador, Estados Unidos y otros lugares; establecimiento de campamentos de entrenamiento de tipo militar para sus miembros. Y señala que obtuvieron armas militares como rifles, pistolas, granadas, artefactos explosivos improvisados (IED) y lanzacohetes. Como líderes de la MS-13, los acusados controlaban franjas de territorio y participaban en actividades de relaciones públicas en nombre de la organización delictiva transnacional. Además, los acusados utilizaban la gran cantidad de miembros de la MS-13 en los Estados Unidos para participar en actividades delictivas, como el tráfico de drogas y la extorsión para recaudar fondos en apoyo de las actividades terroristas de la MS-13 en El Salvador y en otros lugares, y dirigían a sus miembros en los Estados Unidos a cometer actos de violencia, incluidos asesinatos, para promover sus objetivos.

En Nueva York, a la MS se le atribuyen al menos 4,000 casos de actos de violencia, entre ellos asesinatos, intentos de asesinato, asaltos, secuestros, tráfico de drogas, extorsión de personas y empresas, obstrucción de la justicia y envío de las cuotas y el producto de la actividad delictiva por transferencia electrónica a los líderes de la MS-13 en El Salvador.

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“Como se expone más adelante en el acta de acusación, la Ranfla Nacional ha ejercido su poder sobre el Gobierno de El Salvador cometiendo actos de violencia e intimidación contra funcionarios del gobierno, los organismos de represión y la población de El Salvador en general”, añade un apartado en la referida acusación.

Como se alega en el acta de acusación, desde aproximadamente 2012 hasta 2015, la Ranfla Nacional de la MS “entró en una ‘tregua’ con el entonces Gobierno de El Salvador.  Como parte de ese acuerdo, la Ranfla Nacional ordenó a la MS-13 que redujera los homicidios a cambio de mejores condiciones carcelarias, prestaciones y pagos en efectivo”.

Según las investigaciones, cuando se cayeron los acuerdos, la ranfla culpó a los Estados Unidos, creyendo que habían presionado al Gobierno de Salvador Sánchez Cerén, para ponerle fin a la tregua.

“A partir de entonces, a principios de 2016, la Ranfla comenzó a planificar una importante campaña de violencia coordinada en El Salvador en represalia por las medidas más severas impuestas a sus miembros tras el fin de la tregua”, indica el informe.

Como se alega en la acusación, los acusados ordenaron a todas las clicas de El Salvador que crearan una unidad especializada de miembros de la MS-13 para atacar a los agentes de policía, los militares y los funcionarios gubernamentales de El Salvador.

Los acusados también ordenaron a todas las clicas, incluidas las de los Estados Unidos y el EDNY, que proporcionarán los beneficios de sus actividades delictivas relacionadas con la MS-13 para que se utilizaran en la compra de armas para los ataques previstos contra la policía en El Salvador.

En total, los acusados recaudaron más de $600.000 para este fondo que se utilizó para comprar armas, incluyendo ametralladoras M-16 y M-60, granadas, IED y lanzacohetes.

Además, los acusados ordenaron un aumento de la violencia, incluyendo asesinatos, en el EDNY y en otras partes de los Estados Unidos, que vieron un dramático aumento de la violencia con las MS-13 en 2016 y 2017.

Por último, como se alega en la acusación, la Ranfla dirigió la expansión de las actividades de la MS en todo el mundo, sobre todo en México, donde se envió a varios dirigentes de alto rango para que organizaran operaciones para obtener narcóticos y armas de fuego, e hicieron negocios con los cárteles mexicanos de la droga, como los Zetas, el Cártel del Golfo, el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa, y se dedicaron a la trata y el contrabando de personas.

El fiscal general, en funciones, Jeffrey A. Rosen, expresó su agradecimiento al fiscal general de El Salvador, Raúl Melara, por la asistencia, así como a los investigadores de la Policía Nacional Civil de El Salvador, unidad del Centro Transnacional Antipandillas.

En cuanto a los acusados, si son declarados culpables, se enfrentan a una sentencia máxima de cadena perpetua.

En esta operación, denominada Fuerza de Tarea Conjunta Vulcano (JTFV), participan miembros de la División de Seguridad Nacional y de la División Penal del Departamento de Justicia. Fiscalías de todo el país, incluyendo el EDNY; el Distrito de Nueva Jersey; Ohio; Utah; Virginia; Massachusetts; Texas; Nueva York; Alaska; Florida; California; Nevada, y el Distrito de Columbia. Además, todos los organismos de aplicación de la ley del Departamento de Justicia participan en el esfuerzo, incluidos el Buró Federal de Investigaciones (FBI), la Administración de Lucha contra las Drogas de los Estados Unidos, la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos, el Servicio de Alguaciles y la Oficina de Prisiones de los Estados Unidos.