Por: Redacción YSKL
La implementación de la fase 5 del Plan Control Territorial denominada “Extracción”, con la instalación de cercos militares en comunidades, barrios y municipios, con el objetivo de identificar y detener a miembros de grupos delincuenciales, ha propiciado la disminución de la criminalidad en zonas consideradas como de riesgo.
El 3 de diciembre de 2022, por orden del presidente de la república, Nayib Bukele, fueron desplegados en Soyapango cerca de 8,500 elementos de la Fuerza Armada y 1,500 de la Policía Nacional Civil (PNC), con el único fin de dar capturar a todos los miembros de las estructuras del crimen organizado.
Hasta la fecha los resultados reportados por las autoridades de Seguridad indican más de 900 presuntos miembros de pandillas detenidos, así como el decomiso de drogas, armas y otros ilícitos.
Por otra parte, aspectos que resaltan como parte de la intervención militar y policial directa en dicho sector es la recuperación de 975 viviendas que fueron usurpadas por los supuestos delincuentes durante años en colonias como La Campanera o Prados de Venecia.
El régimen de excepción se posicionó como una de las estrategias de seguridad más efectivas utilizadas por la actual administración gubernamental para incidir en los indicadores de violencia en el país. Desde su instauración en marzo de 2022 se reporta la detención en todo el territorio de alrededor de 62,975 aparentes pandilleros.
La mayoría de la población salvadoreña reconoce la efectividad del régimen de excepción y de los cercos militares, ya que aseguran que las bandas delictivas no operan en sus colonias, barrios y cantones en todo el país.