Se cumplen 39 años de la muerte del Coronel Domingo Monterrosa, el militar más emblemático en la época del conflicto armado

Por: Redacción YSKL

Un día como hoy, pero hace 39 años murió José Domingo Monterrosa, considerado en la época como el mejor estratega del Ejército salvadoreño. Murió el 23 de octubre de 1984.

El Coronel perdió la vida luego que el helicóptero en el que viajaba, del tipo UH-1H, se precipitó a tierra y se incendió, producto de este incidente, murieron 14 personas, tres oficiales, dos soldados de artillería, tres periodistas castrenses y un sacristán.

En ese mismo año había sido asignado a la operación Torola IV, que movilizó a más de 2,000 soldados y varios helicópteros facilitados por el gobierno de Estados Unidos. El hecho ocurrió a las 4:50 de la tarde, en las cercanías de Joateca, departamento de Morazán.

El ejército atribuyó el incidente a fallas mecánicos, sin embargo, la emisora guerrillera Radio Venceremos atribuyó a la guerrilla la autoría del percance.

Aunque no fueron dadas a conocer las causas por las que la aeronave cayó, el militar goza del mote de «héroe de Joateca» entre los círculos más tradicionales del país. Tanto así, que unidades militares bautizaron oficinas, cuarteles y hasta el museo de la Fuerza Armada honró con su nombre una de sus exhibiciones en el Cuartel El Zapote, del Barrio San Jacinto, San Salvador.

Sin embargo, el 2 de Junio de 2020, y ante el reclamo que hizo en mayo del 2019 el relator de la ONU, Fabían Salvioli, acerca de retirar el nombre de Monterrosa de la unidad militar de San Miguel, el Presidente Nayib Bukele, ordenó borrar el nombre de la fachada de la Tercera Brigada de Infantería, acto seguido la institución castrense renombró la sala especial que tenía el «héroe de Joateca» en el Museo militar.

Monterrosa, es una de las piezas claves que han sido señaladas de orquestar la «Operación Rescate Morazán», de la cual se desprende la masacre de El Mozote, ocurrida el 13 de diciembre de 1981.

De acuerdo con el Informe de la Comisión de la Verdad de las Naciones Unidas en El Salvador de 1993, unidades del Batallón Atlacatl cuyo comandante en esos días era el teniente coronel Monterrosa, torturaron y ejecutaron “deliberada y sistemáticamente” a 989 personas, entre niños, hombres y mujeres del cantón El Mozote y otros sitios aledaños en el municipio de Meanguera, en el departamento de Morazán.

La masacre tuvo connotación internacional y la mirada se centró en la participación de Monterrosa, cuyas ideas arraigadas en la estrategia de «tierra arrasada», y «quitarle el agua al pez», constituyeron su autoría casi por antonomasia.