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Por Redacción YSKL
El senador estadounidense Chris Van Hollen se refirió a la situación del salvadoreño Kilmar Abrego García, actualmente detenido en el Centro de Confinamiento Contra el Terrorismo (CECOT), y solicitó al vicepresidente de El Salvador, Félix Ulloa, que permitiera el contacto entre el detenido y sus familiares o abogado.
Según Van Hollen, dicha petición fue rechazada.
«Pedí, en interés de la misericordia, permitir al menos que su esposa o su madre, o que su abogado se pusiera en contacto con él en la cárcel para revisar su bienestar, y el Vicepresidente no quiso acceder a dicha solicitud», explicó.
Durante su visita oficial, el senador destacó que el objetivo era verificar el estado de salud de Abrego García, quien no ha tenido comunicación con el exterior desde su traslado.
Indicó que la administración Trump reconoció ante un tribunal estadounidense que se trató de un «error administrativo» el envío de Abrego García a El Salvador, lo que calificó como una detención ilegal.
Van Hollen afirmó que la Corte Suprema de los Estados Unidos resolvió por unanimidad que el gobierno debía facilitar el regreso del detenido a Maryland.
No obstante, según dijo, en lugar de acatar dicha orden, las autoridades estadounidenses habrían reprendido al abogado que lo reconoció ante el juez.
Sin embargo, reiteró que no recibió respuesta favorable.
«Debo señalar que, desde que el Sr. Abrego García fue secuestrado ilegalmente y enviado a la CECOT, no ha tenido ninguna comunicación con nadie en el exterior. Su esposa y sus abogados han intentado hacer contacto con él, pero no han podido», aseguró, el senador Demócrata.
La Fiscalía General de los Estados Unidos, por su parte, sostuvo este miércoles que la deportación de Abrego García cumplió con los procedimientos legales.
La fiscal estadounidense, Pam Bondi, explicó que la decisión fue respaldada por un tribunal de inmigración y un juez de apelaciones, quienes determinaron que el detenido era miembro activo de la pandilla MS-13, específicamente de la célula Westerns.
Según los documentos compartidos posteriormente por Bondi, durante su detención en 2019 en Estados Unidos se identificaron elementos de la cultura de pandillas en su vestimenta, y aunque no fue condenado por delitos previos, su permanencia en el país representaba un riesgo.
La funcionaria añadió que su ingreso a territorio estadounidense fue irregular en 2012 y que las autoridades migratorias le negaron la fianza por considerarlo un peligro de fuga.
También aseguró que el gobierno salvadoreño se ha comprometido a no permitir el regreso de Abrego García, y que el presidente Nayib Bukele mantiene una postura firme en este tipo de casos.
