Por: DW
La comisaria europea de Gestión de Crisis, Hadja Lahbib, exigió a Israel el miércoles que levante «todas las barreras» a la entrada de ayuda humanitaria en Gaza, ante los planes del país hebreo de retirar mañana 1 de enero las licencias a 37 ONG que operan en la Franja y también en Cisjordania.
«La Unión Europea ha sido clara: la ley de registro de ONG no puede implementarse en su forma actual. Todas las barreras al acceso humanitario deben levantarse», escribió Lahbib en sus redes sociales.
El gobierno de Israel retirará mañana 1 de enero las licencias a 37 ONG que operan en Gaza y también en Cisjordania, entre ellas Médicos Sin Fronteras (MSF), al considerar que empleados de esas organizaciones «estuvieron involucrados en actividades terroristas».
«La ayuda salva vidas»
El Ministerio israelí de la Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo sostiene que estas organizaciones no entregaron a las autoridades israelíes «información completa y verificable sobre sus empleados».
La comisaria Lahbib añadió que los planes de Israel de «bloquear a las ONG internacionales en Gaza suponen bloquear una ayuda que salva vidas».
«El Derecho Internacional Humanitario no deja lugar a dudas: la ayuda debe llegar a quienes la necesitan», aseveró.
En marzo de 2025, mientras proseguía la ofensiva del Ejército israelí en Gaza, el gobierno de Benjamín Netanyahu introdujo nuevos requisitos para otorgar licencias a las ONG internacionales que operan en los territorios palestinos ocupados.
El Ministerio de la Diáspora también aseguró que las ONG afectadas ya fueron notificadas de que sus licencias se revocarán a partir del 1 de enero de 2026 y de que deben completar el cese de sus actividades antes del 1 de marzo.
MSF y Hamás rechazan veto
Entre las 37 organizaciones afectadas hay ONG de países como España, Holanda, Japón, Suiza, Suecia, Francia, Reino Unido o Canadá, y entre ellas figuran algunas de renombre como Médicos Sin Fronteras, Acción contra el Hambre, OXFAM o Movimiento por la Paz.
En un comunicado, Médicos Sin Fronteras (MSF) instó a Israel a permitirle seguir operando en Gaza y en Cisjordania ocupada en 2026.
«Hacemos un llamado a las autoridades israelíes para que garanticen que MSF y otras ONG internacionales estén registradas en Israel y puedan continuar trabajando en Cisjordania y Gaza en 2026», declaró MSF.
Por su parte, el grupo islamista Hamás, considerado terrorista por Israel, la UE y otros países, calificó la medida como un «flagrante desprecio a la comunidad internacional y al sistema de trabajo humanitario».
En un comunicado distribuido por sus canales oficiales, Hamás afirma que esta decisión es un intento de Israel de «politizar la ayuda humanitaria» y convertirla en una «herramienta de chantaje» contra el pueblo palestino.



















