Pandillas de El Salvador obligan a hondureños a traficarles drogas

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Foto: El Heraldo.
Foto: El Heraldo.

Por: Redacción YSKL

Los remanentes de las pandillas de El Salvador han obligado a hondureños a que les trasladen drogas a través de su territorio, so pena de asesinar a sus familias.

Así lo recoge el periódico El Heraldo de Honduras. En un reportaje dan cuenta que en Goascorán, en el departamento de Valle, considerado uno de los municipios más seguros de la nación vecina, la población está siendo obligada a trasegar droga hacia El Salvador.

Goascorán es una comprensión fronteriza con El Salvador, dividido por el río del mismo nombre, es muy usado como ruta migratoria con destino a los Estados Unidos. En este paso es usual el tráfico de drogas, ganado y hasta lácteos, ya que es considerado un punto ciego.

El medio recopiló varios testimonios que revelan que la población ha sido amenazada por los pandilleros si no cumplen las órdenes.

“Yo fui una mañana a traer agua al río, dos tipos se me acercaron y me comenzaron a detallar quién era yo y mi familia. Después me explicaron qué es lo que tenía que hacer para no matarme ni a mi familia”, contó un hondureño a El Heraldo. “No hay manera de escaparse, ellos conocen todo aquí. Nos mandan a Nacaome y a Alianza (Valle) a traer las encomiendas (drogas) y pasarlas por el río Goascorán hasta El Salvador”, explicó otra víctima de las maras.

La droga que se trafica a El Salvador es surtida por carteles de la droga en Honduras. El modus operandi es que los pobladores deben utilizar sus propios medios, en este caso sus vehículos, para traer la droga a la base de operaciones de los carteles en Nacaome, Alianza y Goascorán, en los departamentos de Valle y Choluteca, luego intercambiarlos con vehículos que proporcionan sujetos vinculados al narcotráfico y dirigirse a Goascorán, donde tendrán que cruzar el río y dirigirse a un cerro en territorio cuscatleco para entregar el encargo a los pandilleros.

En la zona hay ausencia de agentes policiales y militares, lo que se convierte en un punto principal para los pandilleros, que han aprovechado para realizar los traslados de noche.