Por Redacción YSKL
Han pasado tres años desde la desaparición del joven Joshua Romero Chafoya, y hasta la fecha, no se han reportado avances significativos en la investigación por parte de la Fiscalía General de la República (FGR).
Debido a esta situación, se presentó un escrito solicitando que el expediente sea transferido a la Subdirección de Criminalidad Organizada.
La abogada de la Asociación Salvadoreña para los Derechos Humanos (ASDEHU), Idalia Zepeda, explicó esta petición, indicando que, en El Salvador, «no existe una Ley de Personas Desaparecidas o de Búsqueda», y que la principal herramienta que se utiliza es un protocolo de acción urgente.
Explicó además que al implementarse este protocolo, se creó una Unidad Especializada dentro de la Fiscalía, pero que esta, con solo siete fiscales, «no da abasto para la cantidad de desapariciones».
En cuanto a la situación de personas desaparecidas, las organizaciones sociales han logrado documentar 92 casos activos. ASDEHU representa legalmente a 33 de estos casos, mientras que el Bloque de Búsqueda gestiona 46 y COFADEH se encarga de 13.
Solo en agosto, se emitieron 14 alertas de desaparición, de las cuales algunas personas fueron encontradas sin vida, y en septiembre ya se han reportado cinco o seis alertas más, sin resultados hasta el momento.
«Ninguna ha sido encontrada, siguen estando desaparecidas», señaló Zepeda.
Las organizaciones hicieron un llamado a las autoridades para que sean más diligentes en estos procesos, ya que los familiares de las víctimas siguen esperando respuestas, con la esperanza de encontrar a sus seres queridos.



















