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Por: Redacción YSKL
El Juzgado de Sentencia de Sensuntepeque, Cabañas, impuso hasta diez años de cárcel a dos personas que se hicieron pasar como fiscales para estafar a una familia por un monto de $7,800.
Los condenados son Elio Alexis Arévalo Rodríguez y Katherine Mayeli Díaz Regalado, quienes dijeron a las víctimas -madre e hija- que laboraban para la Fiscalía General de la República (FGR) y que por eso les ayudarían a sacar de la cárcel a uno de sus familiares. En ese contexto, los estafadores exigieron, inicialmente, $7,800.
La Fiscalía estableció en juicio que el 24 de mayo de 2023, Arévalo Rodríguez, se presentó a la vivienda de las víctimas, en Cabañas, para ofrecerles sus servicios como empleado de la FGR, les aseguró también que fue enviado por su pariente detenido.
Para hacer creíble sus palabras, brindó un número de teléfono para que la madre del capturado se comunicara con él; luego, Arévalo Rodríguez contactó a la víctima para decirle que su hijo había autorizado que le entregaran su vehículo. La mujer accedió a la petición el 26 de mayo.
El 1 de junio del mismo año, el estafador llegó con un documento de compraventa del automotor y obligó a una de las víctimas a plasmar sus huellas dactilares.
Transcurridos unos días, aseguró a las víctimas que su familiar saldría libre, pero que necesitaba pagar una fianza de $7,800; en ese momento, Arévalo Rodríguez llamó por teléfono a una mujer que se identificó como «Yolanda», la cual afirmó que trabajaba en la Fiscalía de San Salvador.
Las investigaciones determinaron que esa mujer era Katherine Mayeli Díaz Regalado, la segunda implicada en la estafa. Las víctimas se confiaron de los impostores y entregaron el efectivo en diferentes fechas y cantidades. Además, fueron despojadas de sus prendas de valor como cadenas, pulseras y anillos.
Sin embargo, las víctimas denunciaron a los imputados y estos fueron arrestados el 24 de julio de 2024 cuando pretendían recoger $4,000. Las pruebas presentadas por la FGR fueron determinantes para que el juez del caso impusiera diez años de prisión a Arévalo Rodríguez por estafa y apropiación o retención de vehículo automotor, mientras que para Díaz Arévalo la sentencia fue de cinco años por estafa.
