Senador de EE. UU. Chris Van Hollen pide liberación de salvadoreño Ábrego García, tras ser deportado por error y sin cargos al CECOT

Por Redacción YSKL

El senador estadounidense Chris Van Hollen instó este miércoles al gobierno de El Salvador a liberar a Kilmar Ábrego García, un salvadoreño que fue deportado desde Estados Unidos y actualmente se encuentra detenido en el Centro de Confinamiento Contra el Terrorismo (CECOT), pese a que, según registros judiciales, no enfrenta cargos y contaba con estatus legal en territorio estadounidense.

Durante una reunión sostenida con el vicepresidente salvadoreño, Félix Ulloa, Van Hollen afirmó que “los tribunales de Estados Unidos han dicho que no hay pruebas que apoyen la acusación de que forma parte de la MS-13”.

Al respecto, cuestionó por qué El Salvador continúa reteniéndolo si “no ha cometido ningún delito”.

No hay pruebas de ningún crimen

El legislador, representante del estado de Maryland, expresó que el caso de Ábrego García fue un error reconocido por la propia justicia estadounidense.

“Un juez de un tribunal federal estadounidense dijo que la administración Trump no tenía pruebas que respaldaran la afirmación de que alguna vez había formado parte de la MS-13”, indicó.

Subrayó que Ábrego fue protegido de la deportación durante la administración Trump, sin que se apelara dicha decisión.

Además, citó la sentencia de un juez federal en Maryland que determinó: “no tenían autoridad legal para arrestarlo, ni justificación para detenerlo, ni motivos para enviarlo a El Salvador, entregándolo a una de las prisiones más peligrosas del hemisferio occidental”.

Van Hollen también mencionó que el Tribunal Supremo de Estados Unidos resolvió de manera unánime que la administración debe facilitar el regreso del salvadoreño.

“La administración Trump debe cumplir la ley”, aseveró.

Datos relevantes sobre Kilmar Ábrego García

• Residente en Maryland, con estatus legal y permiso de trabajo.
• Esposo de una ciudadana estadounidense y padre de tres hijos, algunos con discapacidades.
• Fue deportado en un vuelo con más de 200 migrantes, principalmente venezolanos, enviados al CECOT sin proceso judicial.
• Su defensa argumenta que huyó de El Salvador por amenazas de la pandilla Barrio 18.
• Un juez de inmigración había determinado que su vida corría peligro si era devuelto a El Salvador.

Acusaciones de colaboración y silencio oficial

Durante la reunión con el vicepresidente Ulloa, el senador Van Hollen dijo haber preguntado si el gobierno salvadoreño tenía pruebas de que Ábrego haya cometido algún delito.

Según su relato, la respuesta fue que la administración Trump “está pagando al gobierno de El Salvador para mantenerlo en CECOT”.

Sin embargo, ni el gobierno salvadoreño ni la administración estadounidense han presentado documentación que respalde tal acuerdo.

“El presidente Trump, nuestra fiscal general Pam Bondi y el vicepresidente de los Estados Unidos mienten cuando dicen que Ábrego García ha sido acusado de un delito o es parte de la MS-13. Eso es una mentira”, declaró el senador, quien reiteró que la retención del salvadoreño “es injustificable”.

Van Hollen también lamentó que no se le haya permitido reunirse con el detenido.

“Pregunté si podía reunirme con el señor Ábrego García (…) me dijo que no podía hacerlo y que necesitaba un poco más de tiempo”, afirmó en relación con la respuesta de Ulloa.

Tampoco fue autorizado a establecer contacto telefónico o videollamada.

Apoyo legislativo y llamado al Presidente Bukele

El caso ha sido respaldado por otros congresistas demócratas, incluyendo a Maxwell Alejandro Frost, Robert García y Yassamin Ansari, quienes han calificado las expulsiones como ilegales.

Organizaciones de derechos humanos han señalado que este tipo de traslados podrían constituir “desapariciones forzadas”.

“Pido al Presidente Bukele que haga lo correcto y permita salir de la cárcel a un hombre que no ha sido acusado ni condenado por ningún delito y que fue secuestrado ilegalmente en Estados Unidos”, solicitó Van Hollen.

El senador agregó que continuará gestionando el caso desde El Salvador y desde el Congreso.

“Puede que sea el primer senador de los Estados Unidos que visita El Salvador por este asunto, pero habrá más”, afirmó.