Estados Unidos negará ingreso a 13 militares y sus familias, implicadas en la masacre de los sacerdotes jesuitas en la UCA

El Departamento de Estado de los Estados Unidos señaló a trece militares salvadoreños en el cometimiento de graves violaciones a los derechos humanos, relacionada a la masacre de los jesuitas en la Universidad Centroamericana (UCA), informó la Casa Blanca en un comunicado.

Esta designación se debe a su participación en la planificación y ejecución de las muertes de seis sacerdotes y otras dos mujeres, el 16 de noviembre de 1989 en el campus de la UCA.

“Estados Unidos condena todos los abusos contra los derechos humanos que tuvieron lugar en ambos lados de la brutal guerra civil en El Salvador, incluidos los cometidos por partidos gubernamentales y no gubernamentales”, reza parte del documento.

De acuerdo con Whashington, el Secretario de Estado tiene la facultad de negar el ingreso a los Estados Unidos a familiares y militares actuales o anteriores, en caso que “se tenga información creíble de que han estado involucrados, directa o indirectamente en una violación grave de derechos humanos o corrupción signiticativa”.

La legislación de Estados Unidos no aplica a la conducta de personas que no son funcionarios gubernamentales actuales o anteriores, aunque dichas personas pueden estar sujetas a otras restricciones de visa según la ley de los EE. UU.

El Departamento tiene información creíble de que las siguientes personas han estado involucradas en violaciones graves de los derechos humanos: Juan Rafael Bustillo, Juan Orlando Zepeda, Inocente Orlando Montano Morales, Francisco Elena Fuentes, Guillermo Alfredo Benavides Moreno, Yusshy René Mendoza Vallecillos, José Ricardo Espinoza Guerra , Gonzalo Guevara Cerritos, Carlos Camilo Hernández Barahona, Oscar Mariano Amaya Grimaldi, Antonio Ramiro Avalos Vargas, Ángel Pérez Vásquez y José Alberto Sierra Ascencio.

El Gobierno estadounidense señala a estos 13 castrenses de estar involucrados en el crimen.