El Ministro de Salud, Francisco Alabí, señaló que a la entrada de salvadoreños o extranjeros al país se debe verificar si estos tienen el desarrollo del COVID-19, pero no se está negando la entrada de los connacionales.
«Sería una irresponsabilidad no solicitar la prueba a los salvadoreños desde el momento de su llegada», aseguró.
Esto con relación a la resolución de la Sala de lo Constitucional en la que ordenó dejar sin efecto la medida de restricción de ingreso al país a salvadoreños y residentes que no presenten el resultado negativo de la prueba PCR de al menos tres días previos a su llegada.
Además, el Máximo Tribunal consideró que se había incumplido referida medida cautelar y notificó a la Fiscalía General de la República (FGR) por el posible cometimiento de delitos por las autoridades de Gobierno.
«La población puede juzgar si se trata de un delito, las autoridades tienen sus responsabilidades. Puedo aseverar y recomendar que por parte de la salud no es congruente, no se trata de negarle la entrada a un salvadoreño», respondió Alabí a la acción legal por parte de la Sala.
«Si no tenemos medidas habrá inicio de brotes. No podemos sugerir intervenciones que no se sean dirigidas a velar por la salud», añadió.
No obstante, los magistrados expusieron que debido a que el Gobierno «transfirió» la responsabilidad de la exigencia de pruebas a las aerolíneas y de caso contrario impondrían una multa, se estableció que sí se incumplió la medida.
Asimismo, dijeron que para decretar esta restricción debe existir un régimen de excepción, pues se trata de un derecho constitucional de los connacionales su entrada al territorio salvadoreño, recurso que le compete emitirlo a la Asamblea Legislativa.
Por lo tanto, la instancia judicial recomendó tomar otras acciones, como la cuarentena domiciliar o en centros de atención médica para quienes arriban a El Salvador, medidas que hasta el momento no han sido anunciadas por el Ejecutivo.