Los titulares del Ministerio de Economía y Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (SIGET), verificaron este viernes los avances en la construcción de la primera planta de gas natural licuado de El Salvador.
La nueva central se construye en la planta “LNG-To-Power” del puerto de Acajutla, en Sonsonate, y tendrá una capacidad para generar 378 megavatios (MW) de energía.
Además, contempla una unidad flotante de almacenamiento y regasificación, una tubería submarina de 2 kilómetros de largo y la central eléctrica con capacidad de 378 MW.
La obra también incluye la instalación de dos líneas eléctricas de transmisión de 230 kV, una de aproximadamente 44 kilómetros, que conectará la central generadora con la subestación eléctrica de Ahuachapán, y otra con la subestación de Acajutla.
El megaproyecto es ejecutado por la empresa Energía del Pacífico (EDP) y tendrá una inversión de $1,000 millones.
El Superintendente Manuel Aguilar indicó que la planta tendrá la suficiente capacidad para abastecer alrededor del 30 % de la demanda de energía eléctrica de El Salvador y contribuirá al medio ambiente.
“La construcción de la planta generadora de electricidad a base de gas natural contribuirá a la diversificación de la matriz energética, a mejorar el medio ambiente (con la producción de energía limpia), y a promover el uso del gas natural en la región”, explicó.
De acuerdo con la Ministra de Economía, María Luisa Hayem, el proyecto ha contribuido a la generación de más de 800 empleos directos y más del 60 % de los trabajadores son locales, y se tiene previsto incrementar la mano de obra durante las próximas fases de la construcción.
“No sólo le apostamos a la generación de energía, sino que también desde ya está generando empleos», añadió. Y agregó que el megaproyecto tiene un avance del 55% y se espera que esté funcionando en el segundo semestre de 2022.