Alcaldía de San Salvador niega cobro de tasa municipal por Smart City a partir de marzo

La Alcaldía de San Salvador negó a través de un comunicado que a partir de este mes de marzo se haya comenzado a cobrar la tasa municipal de seguridad y convivencia correspondiente al proyecto «Defenssa Capital».

Según el pronunciamiento que compartió la comuna señalaron que «no realizará ningún cobro este mes como diferentes medios de comunicación han dado a conocer en los últimos días. El cobro del proyecto se hará efectivo hasta el 100% de su totalidad».

El mes de octubre de 2020, el edil capitalino Ernesto Muyshondt confirmó que el concejo municipal aprobó una reforma a la Ordenanza Reguladora de Tasas por Servicios Municipales que permitirá el financiamiento del proyecto de seguridad, también conocido como «Smart City». Fue entonces donde se expuso que comenzaría a cobrarse a partir del 1 de marzo.

“En un principio se había contemplado que si ya existía el sistema en una zona, esa zona iba a empezar a pagar. Pero por la situación económica, por los efectos de la pandemia, se logró una negociación con la empresa, donde hasta que esté completo todo van a empezar a pagar todos. Habrá sectores que ya en diciembre estarán funcionando, pero no van a pagar hasta en marzo, porque queremos que la población vea los beneficios del sistema”, indicó el edil en su momento.

En enero de este año inauguró la primera etapa y estableció que el pago iniciaría hasta que estuviera funcionando al 100%.

Por lo que a inicios de este mes, comenzó a circular en medios y redes sociales sobre este cobro, mismo que fue expuesto por su contendiente electoral, el alcalde electo, Mario Durán; quien aseguró que el impuesto se comenzó a cobrar como una estrategia hasta después de las elecciones.

Aseveración que fue negada por Muyshondt.

El costo total del proyecto asciende a $84 millones de dólares, y el costo de operación al mes se traduce en $400,000 dólares; esto será financiado a través de tasas municipales que oscilan entre los $0.10 a $10.00, “la casa más cara del país, de más de 1,000 metros cuadrados, que esté ubicada en zona exclusiva de San Salvador pagará $10,00; la empresa más grande de la capital que tenga un edificio de más de mil metros cuadrados, $70,00; y las micro, pequeñas, medianas empresas y las viviendas de clase media y media baja, pagarán entre $0,1 a $0.90 centavos de dólar”, según los detalles del actual alcalde.