El encargado de Negocios de la Embajada de Estados Unidos en El Salvador, Brendan O’Brien, no asistió a la convocatoria del Presidente Bukele para justificar ante el cuerpo diplomático acreditado la destitución de magistrados y fiscal general por la Asamblea Legislativa.
“No sé por qué no vino. Me preocupa porque cuando uno solo tiene información de un lado, pues lo más seguro es que va a estar equivocado en su conclusión. No hay ser humano que pueda tener un solo lado de la moneda y que puede describirla», indicó el mandatario mientras se desarrollaba la reunión que fue transmitida en cadena nacional la noche de este martes.
El Presidente asemejó el cambio de fiscal a las remociones que hace el mandatario estadounidense, «Obama llega y pone el de él, Trump llegó y puso al de él, Biden lo cambió».
Un nuevo fiscal general era una aspiración del actual gobierno desde 2019, según confirmó Bukele.
«Cuando llegué a la presidencia pregunté qué vamos a hacer con la Fiscalía […] ¿Cómo vamos a hacer para trabajar con un mal fiscal, totalmente de ARENA? Me dijeron: “se va a tener que aguantar […] Para tener su fiscal o un fiscal afín, tiene que esperar dos años”. La Constitución no permite que el Presidente nombre el Fiscal», expuso.
Fue hasta el cambio de Asamblea que se destituyó a Raúl Melara como Fiscal General, por vinculación partidaria.
Bukele también se refirió a la reciente visita del enviado especial de Estados Unidos al Triángulo Norte de Centroamérica, Ricardo Zúñiga, en la que aseveró se reunió con organizaciones de oposición, mas no de la sociedad civil.
«El enviado se reúne con 10 organizaciones ANEP, CAMARASAL, FUSADES, FUNDE, las 10 opositores, si las encuestas dicen que el 90% apoya al gobierno, debieron ser 9 organizaciones que apoyan al gobierno para representar a la sociedad civil. No se reunieron con la sociedad civil, se reunieron con la oposición», dijo en cadena nacional.
