Organizaciones: Ley de Agentes Extranjeros violenta libertad de expresión, asociación y defensa de derechos humanos

Policía cerca una de las entradas de la Asamblea Legislativa para impedir el paso de una marcha de sindicalistas. Foto: YSKL.
Policía cerca una de las entradas de la Asamblea Legislativa para impedir el paso de una marcha de sindicalistas. Foto: YSKL.

Por: Redacción YSKL

Ante la inminente aprobación de la Ley de Agentes Extranjeros, que regulará el financiamiento que reciben Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) salvadoreñas, unas 50 entidades externaron su preocupación a lo que podría ser una legislación que afecte directamente la lucha por los derechos humanos.

Según dijeron, contiene “conceptos jurídicos indeterminados” que abren paso a la imposición de restricciones; además cuestionaron que se apliquen sanciones e impuestos prohibitivos cuando aún, supuestamente, no se ha especificado con claridad las OSC que serán obligadas a cumplir con la virtual ley.

Calificaron la ley como violatoria a derechos fundamentales, como la libertad de expresión, asociación, afectando el trabajo que impulsa organizaciones de derechos humanos, asociaciones comunales y organizaciones de expresión popular.

“Dejan al descubierto una propuesta ambigua que representa un potencial obstáculo para la continuidad de múltiples programas e iniciativas, cuyos beneficios llegan de forma eficiente y oportuna a la población que más lo necesita”, reza parte del pronunciamiento.

La Ley de Agentes Exteriores ya fue dictaminada en la Comisión de Relaciones Exteriores, tras realizar cambios a la presentada por el Gobierno, aumentando multas e imponiendo prisión, por lo que sería aprobada en la sesión plenaria del martes de la Asamblea Legislativa.

Esta ley plantea que las organizaciones, fundaciones o asociaciones financiadas por extranjeros deberán pagar un 40% de impuesto al Estado, a excepción de las relativas a la salud, cultura y que ejecuten proyectos de cooperación al desarrollo del país con el gobierno central, alcaldías o comunidades.

Pero también obliga a que las entidades no realicen actividades que alteren el «orden público», bajo fondeo internacional.

Esto luego que las recientes manifestaciones y marchas fueran señaladas por el mismo Presidente Nayib Bukele de ser financiadas por organismos internacionales, por lo que fue mencionada hasta la Embajada de Estados Unidos por diputados de Nuevas Ideas.

Todas las organizaciones que sí contempla la ley, denominadas agentes extranjeros, deberán registrarse en un máximo de 180 días ante el Registro de Agentes Extranjeros (RAE), dependencia del Ministerio de Gobernación.

Desde la entrada en vigencia de la ley, no podrán realizar actividades hasta estar registrados.

El incumplimiento de la ley demanda una multa desde $100 mil a $150 mil.

Las prohibiciones

Se sancionará con multa desde $150 mil dólares a $250 por:

  • Actuar como agente extranjero o realizar actividades sin estar registrado en la RAE.
  • Recibir donaciones u otros mecanismos de financiamiento para la realización de actividades, no declaradas previamente en el RAE o recibir fondos de países catalogados como países fiscales.
  • Recibir donaciones, fondos o bienes procedentes de fuentes anónimas.
  • Transmitir o hacer transmitir en el país correos o mensajes por cualquier medio para o en interés de un mandante extranjeros sin colocar que dichos materiales son en nombre de quien dio los fondos.
  • Ocultar que las actividades son realizadas, financiadas o dirigidas en nombre de una entidad extranjera.

Prohibiciones que conllevan a cancelación de la organización

  • Realizar actividades para fines políticos con el objetivo de alterar el orden publico o que pongan en riesgo la seguridad nacional.
  • Cambiar el propósito declarado por el que recibieron los fondos.

Responsabilidad penal

De 2 a 5 años de cárcel enfrentará la persona o representante de organización que ejecute actos que contravengan el orden público o pongan en riesgo o amenaza la seguridad nacional, la estabilidad social y política del país.