Luego que la Asamblea Legislativa reformara el artículo 345 del Código Penal y el 1 de la Ley de Proscripción de Pandillas, que castiga con cárcel las coberturas informativas sobre pandillas, el Fiscal General, Rodolfo Delgado fue escueto al referirse a la aplicación de las nuevas enmiendas.
Según se lee en los decretos, los comunicadores se atienen a penas de 10 a 15 años de cárcel si “reproducen mensajes originados o presuntamente originados por pandillas que pudieran generar zozobra y pánico en la población”, mientras que la Ley de Proscripción de Pandillas establece la misma condición si se difunden mensajes que hagan alusión al fenómeno pandilleril.
En una entrevista para la televisora estatal, al Jefe del Ministerio Público se le preguntó si estas enmiendas permiten a la prensa seguir informando sobre pandillas. Indicó que “no es atentado contra la libertad de prensa”, pero dejó entredicho, que entrará en apología del delito al enaltecer acciones criminales y “poner en pedestal” a los delincuentes.
“Lo que sí está prohibido y no está prohibido por estas disposiciones, es hacer apología del delito, en glorificar las acciones criminales o ponerlos en un pedestal a delincuentes, cuando en realidad lo que provocan es daño a la población salvadoreña, eso sí es detestable desde cualquier punto de vista, que lo realice un periodista”, señaló, sin embargo, si un informativo llegase a condenar o cuestionar las estrategias de las instituciones de gobierno es “contrario a la ley”.
“Han intentado señalar, cuestionar incluso, las acciones de la Policía Nacional Civil, han intentado cuestionar las acciones de Dirección General de Centros Penal, han intentado cuestionar todas las acciones de inteligencia que sirven para recabar información y eso es contrario a la ley”.
Además, Delgado contestó, que algunos medios de comunicación han “utilizado hipótesis falsas” de investigaciones del Gabinete de Seguridad, que les son filtradas cuando están en la fase de corroboración, para “glorificar” o “ganar premios”. En ese sentido, dijo que son propios de conductas delictivas.
“Revelar anticipadamente, ya sea que se los haya dado un mal funcionario, o se los haya entregado un mal empleado de mi institución, como también es delito revelar información que está contenida investigaciones que están en curso de la FGR; si por ponerse un medalla en el pecho, si por ganar un premio, pretendieron glorificar o tergiversar las acciones de investigación que se estaban desarrollando; entonces eso es problema de ellos, ellos sabrán qué acciones cometieron y cuáles son las consecuencias a las que se tendrán que enfrentar”, sentenció.
