Por: Redacción YSKL
La Mesa Territorial del Foro del Agua de la Cuenca del Río Jiboa llegó este miércoles a la Alcaldía Municipal de San Luis Talpa, para denunciar prácticas contaminantes por parte de una empresa cañera que amenaza el abastecimiento de agua en el Cantón San Marcos Jiboa.
Se trata del segundo escrito que los ambientalistas interponen en dicha municipalidad; aseguran que la empresa Coagri S.A. de C.V., ha extraído agua sin los permisos del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), por medio de retroexcavadoras.
Las máquinas fueron instaladas dentro de los canales de la cañada, que tiene una extensión de 400 manzanas.
Asimismo aseguran que en consecuencia se ha deforestado parte del bosque de San Marcos Jiboa y denuncian la extracción de materiales pétreos, sin la autorización de la alcaldía.
«Por años han venido depredando el medio ambiente, y esto se va agudizando en el sentido que últimamente nos están dejando sin agua al sector ganadero, los agricultores de humedales, deben sobreinvertir para poder sacar sus cosechas […] hay fotografías y videos, se ha presentado denuncias al Juzgado Ambiental de Santa Tecla», indicó uno de los líderes comunales.
En ese sentido solicitan al Alcalde Alejandro Menéndez, que disponga de sus oficios para detener las operaciones de la empresa y retirar los desechos tóxicos de una fábrica de repuestos que se ubica en Cantón Loma El Gallo, que entraron a los afluentes.
Los representantes advirtieron que las operaciones de la agroindustria cañera ya afectaron la calidad del agua de la cuenca del río Jiboa, en el departamento de La Paz, ya que ha afectado el desarrollo y la salud de sus habitantes.
A inicios de año los ambientalistas solicitaron al MARN investigar los daños causados por al menos, 270 proyectos encabezados por empresas agroindustriales y cañeras, pues supuestamente han vertido en el río venenos nocivos para la salud, como el glifosato, afectando a los pobladores con enfermedades de la piel, insuficiencia respiratoria y enfermedades renales.
Además señalaron que las empresas han extraído agua desmedidamente de la cuenca dejando sin su abastecimiento a más de 5,000 habitantes de la zona.
Otros daños ocasionados al cuerpo de agua, ha sido provocados por empresas de la construcción, que extraen la mayor cantidad de materiales pétreos de la cuenca baja, lo que provoca más daño a la salud de las comunidades. San Luis Talpa es el municipio que ha reportado varios casos de insuficiencia renal.
La cuenca del Río Jiboa es un territorio de 615 kilómetros cuadrados compartidos por los departamentos de La Paz, San Vicente, Cuscatlán y San Salvador.
La zona media y baja es compartida por cinco municipios de La Paz: San Miguel Tepezontes, Rosario de la Paz, San Antonio Masahuat, San Luis Talpa, San Juan Talpa, y Tapalhuaca, en donde han encontrado una gran cantidad de actividades destructivas, por el monocultivo de la caña de azúcar, proyectos agroindustriales, industriales y vertidos de aguas residuales.
Esta actividad tiene varios impactos: Erosión de sueños, fumigación que, por escorrentía terminan en el río y percolan en acuífero, uso de cachaza que termina en el afluente y deshidratación de sueños por quema de cosechas.
Según los manifestantes, han solicitado a la Alcaldía que emita una ordenanza municipal que prohíba las operaciones de la industria cañera.