Por: DW
Las fuertes lluvias que azotan el noroeste de Japón dejan al menos cinco personas desaparecidas que fueron arrastradas por aguas de los ríos desbordados, informaron las autoridades este viernes.
Los aguaceros obligaron a la Agencia Meteorológica nipona (JMA) a decretar la alerta máxima en la prefectura de Yamagata.
Dos policías desaparecieron después de que su vehículo fuera arrastrado por la corriente provocada por las lluvias mientras se dirigían a realizar un rescate a la ciudad de Shinjo, en Yamagata, prefectura que concentró el máximo nivel de lluvias de todo el país y el más alto desde que la JMA recopila datos en la región.
No se conoce tampoco el paradero del hombre al que los dos policías iban a rescatar, cuyo vehículo también fue arrastrado por las aguas, aunque pudo pedir ayuda alrededor de las 23:30 horas (14:30 GMT) del jueves 24 de julio.
Las autoridades están buscando a las tres personas, pero las inundaciones y los desprendimientos de tierra y arena impiden el acceso a la carretera.
«Es un dolor extremo», expresó el director general de la Policía de la Prefectura de Yamagata, Kunio Suzuki, en declaraciones a la cadena pública NHK.
Más personas desaparecidas
En la ciudad de Akita, ubicada en la prefectura con el mismo nombre, afectada también gravemente por las lluvias, desapareció un hombre de 86 años que había salido en bicicleta a visitar a un familiar y cuya vivienda se encuentra cerca del río Omono, desbordado por las precipitaciones.
La familia encontró la bicicleta del hombre flotando en río y la Policía, que lo busca desde las 7:00 horas del viernes (22 GMT del jueves), cree que él podría haber caído al agua también.
Un corrimiento de tierra en la ciudad de Yuzawa, también en Akita, causó la desaparición de otro hombre de 60 años que trabajaba en la construcción de una carretera, por lo que policías y bomberos procedían a su búsqueda.
Yamagata alcanzó a las 6:30 hora local de este viernes (22:30 GMT del jueves) los 389 milímetros de precipitación en Shinjo, los 384 en Mamurogawa y los 289 en Sakata, niveles que equivalen a los más elevados desde que la JMA registra datos de lluvias en la prefectura.
La JMA decretó en la prefectura la alerta máxima de peligro ante las fuertes lluvias, que dejaron además edificios inundados, casas derrumbadas, personas evacuadas, ríos desbordados y árboles caídos que llegaron a las carreteras arrastrados por el agua.
Tras eliminar la alerta en la víspera, volvieron a decretarla por segunda vez en un día, la JMA rebajó el nivel de alerta desde el más alto al de advertencia, aunque dijo que «todavía existía peligro».