Para garantizar la seguridad alimentaria de los habitantes de la zona rural lo cual ha sido una de las prioridades de la actual administración municipal de San Miguel, proyecto que nació en 2016 y se ha visto fortalecido en el marco de la pandemia por COVID-19.
A través del proyecto San Miguel Productivo se ha impulsado 425 granjas distribuidas en los 32 cantones del municipio y donde se han visto a miles de familias beneficiadas directamente con la reproducción de aves y huevos para consumo y comercialización.
La Alcaldía Migueleña a pesar de la crisis, del impago del FODES y la baja recaudación de impuestos continúa invirtiendo en proyectos para que los migueleños tengan acceso a una alimentación sana.
«Vamos a continuar invirtiendo en una agenda social sin precedentes, apoyando a migueleños que han perdido sus empleos, los cultivos, vamos a priorizar la alimentación de todos». Mencionó el edil, Miguel Pereira.