Por: Redacción YSKL
El jueves 4 de noviembre, la administradora de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), Samantha Power, anunció un nuevo programa de cooperación por $300 millones de dólares para empoderar a organizaciones sociales de El Salvador, Honduras y Guatemala.
En el marco del plan de Estados Unidos para abordar las causas de la migración irregular, denominado “Centroamérica Local”, los fondos serán utilizados para “involucrar, fortalecer y financiar” organizaciones locales “para implementar programas que promuevan el crecimiento económico, sostenible y equitativo, mejorar la gobernabilidad, combatir la corrupción, proteger los derechos humanos, fortalecer la seguridad ciudadana y combatir la violencia sexual y de género”.
La jefa del organismo de cooperación hizo el anuncio en la Universidad de Georgetown, donde presentó su visión de las prioridades de USAID bajo la Administración Biden-Harris.
¿Qué impacto tiene el recorte de la ayuda de USAID a El Salvador?
Estos programas se están llevando a cabo bajo la Estrategia de Causas Raíz del gobierno estadounidense con el fin de generar estabilidad en la región.
Power visitó el país el 14 de junio pasado, sostuvo reuniones con representantes de Gobierno, sociedad civil y sector empresarial para tratar temas de democracia y la lucha a la corrupción, así como resaltar «su apoyo a la sociedad civil». El pasado 21 de mayo, USAID anunció la reorientación de fondos que se destinaban a las instituciones estatales como la Policía Nacional Civil, la Fiscalía General de la República y Corte Suprema de Justicia, debido a la decisión de la Asamblea Legislativa en destituir a magistrados constitucionales y al fiscal general.
En su momento, la organización de Estados Unidos expresó su preocupación ante las remociones, la transparencia de las instituciones gubernamentales y rendición de cuentas.