Antes de que El Salvador instaurara un régimen de excepción, el país centroamericano ya tenía en prisión a 16.000 pandilleros aproximadamente. Entre ellos, varios líderes históricos de la Mara Salvatrucha, conocidos como miembros de la Ranfla Nacional o fundadores de la pandilla.

Algunos pandilleros de El Salvador ya habían sido extraditados hacia Estados Unidos, pero ninguno acusado por terrorismo, y ninguno miembro de la Ranfla Nacional.

Fue con la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos que el país norteamericano emprendió una ofensiva legal en contra de la pandilla, declarada “organización criminal internacional” por Estados Unidos, en 2012, y “organización terrorista” por El Salvador, en 2015.

En la era Trump, la Fiscalía General estadounidense, a cargo de William Barr, acusó de terrorismo al pandillero Eliú Melgar Díaz, alias “Blue de gánster”, un líder de la MS cuyo rango en la pandilla es inferior al de los miembros de la Ranfla Nacional o fundadores.

Nayib Bukele ya llevaba un año como presidente de El Salvador cuando los fiscales estadounidenses solicitaron en extradición al “Blue de gánster”, pero la Corte Suprema de Justicia de ese país, nombrada el 1 de mayo de 2021 por la Asamblea oficialista, se negó a extraditarlo.

El fiscal general de El Salvador, Rodolfo Delgado, dijo en su momento que la decisión fue suya, pues consideró que el pandillero primero debía enfrentar la justicia en El Salvador.

Tres días antes de que se venciera el plazo de extradición, el “Blue de gánster” fue condenado a 39 años de prisión en el país centroamericano. Es decir, podrá responder por sus actos ante la justicia estadounidense hasta después de 2060.

Ante el hecho, la Fiscalía del Distrito Este de Nueva York presentó formalmente un listado con el nombre de 14 pandilleros históricos de la Mara Salvatrucha en El Salvador, objetivos de la justicia de ese país. Esta vez, no buscaba extraditar a un líder de inferior rango sino a los ranfleros originales o fundadores de la pandilla.

La Ranfla Nacional de la Mara Salvatrucha

El primer líder de la Ranfla Nacional de la Mara Salvatrucha en ser solicitado en extradición por Estados Unidos fue Hugo Armando Quinteros Mineros, alias «Flaco de Francis», pero la Corte El Salvador también congeló la extradición.

De acuerdo con una investigación del periodista Ricardo Flores, del medio salvadoreño La Prensa Gráfica, un juzgado de ese país impuso una pena de 14 años de prisión al «Flaco de Francis» un día antes de que se venciera el plazo para ser extraditado hacia los Estados Unidos.

«El pleno de la Corte Suprema de El Salvador consideró que Quinteros Mineros debe pagar primero la condena de 14 años de prisión que fue impuesta un día antes por el Juzgado Especializado de Sentencia de San Miguel por el delito de organizaciones terroristas», reza el artículo publicado el 4 de marzo de este año.

Esta es la segunda solicitud de extradición detenida por el Órgano Judicial salvadoreño en torno a los líderes de la Mara Salvatrucha.

Del listado de los 14 fundadores, 2 se encuentran prófugos, según los boletines difundidos por el Buró Federal de Investigación (FBI); mientras que un tercero, Elmer Canales, se halla en México, tras salir de prisión de El Salvador cuando aún tenía condenas pendientes, según investigaciones periodísticas.

El resto, aparentemente, guarda prisión en el penal de máxima seguridad, conocido como Zacatecoluca, en El Salvador.

A parte de la Ranfla Nacional, EEUU busca otros cabecillas

La justicia estadounidense no parece darse por vencida en su propósito de juzgar a los líderes de la Mara Salvatrucha.

El pasado 24 de febrero de este año, el Departamento de Justicia del Distrito Este de Nueva York señaló a otros 13 líderes de la MS por conspiración para extorsionar, conspiración para ofrecer u ocultar apoyo material a terroristas y conspiración narcoterrorista.

Aunque no se trata de los líderes fundadores, en este bloque hay cabezas de la Mara Salvatrucha responsables de «dirigir actividades de la pandilla en El Salvador, Estados Unidos y México», según el nuevo documento presentado por la Fiscalía del Distrito Este de Nueva York, en Estados Unidos.

De los 13 señalados, 3 fueron capturados en México y entregados por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador a finales de febrero de este año. Cuatro más se encuentran aún prófugos, y el resto, según el Departamento de Justicia, se hallan guardando prisión en las cárceles salvadoreñas.

Esta vez, la Fiscalía estadounidense asegura, en la acusación CR22429, que la Mara Salvatrucha «exigió que el gobierno de El Salvador se negara a extraditar a los líderes de la MS, incluida la Ranfla Nacional, para su enjuiciamiento en Estados Unidos».

Estos señalamientos se dan en medio de una afrenta del gobierno salvadoreño contra las pandillas Mara Salvatrucha y Barrio 18, cuyas filas parecen haber sido golpeadas tras instaurar el régimen de excepción a finales de marzo de 2022.

No obstante, ni Bukele ni su gabinete de Seguridad se han pronunciado por la negativa de la Corte Suprema en torno a extraditar a las cabezas de la Mara Salvatrucha.

Una mano dura que desarticula a las pandillas en los barrios

Antes de marzo de 2022, previo al inicio del régimen de excepción en El Salvador, era impensable entrar a los barrios acechados por pandillas. Sin embargo, diversos medios de comunicación, incluida la Voz de América, recorrieron varias comunidades que por años cargaron con el estigma de ser las colonias más peligrosas de El Salvador.

En medio de cuestionamientos por el freno de la Corte Suprema ante la extradición de las cabezas de la Mara Salvatrucha, Bukele se ha ganado el apoyo de buena parte de la población con su estrategia para sacar a las maras de los barrios.

Tras miles de asesinatos y denuncias por extorsión en las últimas décadas, El Salvador podría estar cerrando el capítulo sangriento escrito por la Mara Salvatrucha y el Barrio 18 en el país centroamericano.

De 105 homicidios por cada 100.000 habitantes hace unos años, El Salvador ha bajado a 7,8 homicidios por cada 100.000 habitantes en 2022. Y este año, la tendencia es aún más baja.

Sin embargo, este año, El Salvador tiene, por tercera vez, la decisión de extraditar o no a otro de los líderes de la Mara Salvatrucha, cuyo plazo de extradición vence en mayo de este año.