Por: DW
Tres personas fueron asesinadas en el departamento del Guaviare, en el centro-sur de Colombia, mientras que dos líderes sociales del Cauca (suroeste) perdieron la vida en otros hechos de violencia, se informó este domingo.
Esta madrugada, en la vereda (caserío) de Agua Bonita (Guaviare), sicarios en motocicleta dispararon contra las personas que estaban en un establecimiento comercial, asesinando a un hombre, una mujer y un niño. Asimismo, el administrador del lugar resultó herido, según denunció el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (INDEPAZ).
Guaviare es uno de los departamentos en los que fue suspendido el cese el fuego acordado a principios de 2023 entre el Gobierno colombiano y el Estado Mayor Central (EMC), principal disidencia de las FARC, después de que este grupo asesinara a cuatro niños indígenas que intentaron escapar luego de ser reclutados a la fuerza.
Además, este fin de semana fue asesinado el comunero indígena Gerardo Perdomo, del resguardo de Pitayo, en el municipio de Silvia (Cauca), tras fuertes combates entre grupos armados ilegales en Silvia, Caldono y Jambaló.
Así lo denunció el Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), quien explicó que una misión de verificación encabezada por la autoridad indígena del resguardo ingresó a la vereda Asnenga para «corroborar la vulneración a la población civil» afectada por los «fuertes combates» de los pasados 1 y 2 de junio. «Son 20 familias, entre ellos niños y adultos mayores, que se encuentran confinadas en la casa de la Junta de Acción Comunal (JAC)», lamentó en un comunicado la organización.
El CRIC recordó que ya se había denunciado la situación y recriminó al Gobierno -tanto local como nacional- de haber hecho «poco o casi nada» para «atender eficazmente las demandas en materia de garantías para la salvaguarda de la vida» de la gente de la zona.
INDEPAZ también denunció el asesinato de Guido Idelber Gómez, «un reconocido líder y actual presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Villa Nueva Paraíso en el municipio de Sucre», también en el Cauca. Gómez, que hacía parte del Comité de Integración del Macizo Colombiano (CIMA), fue asesinado con arma blanca en la carretera entre La Vega y Piedra Sentada, y al parecer «habría sido amarrado y torturado», según la fuente.