Por Redacción YSKL
La Asociación de Industriales Químico-Farmacéuticos (INQUIFAR), presentó el Informe Sectorial 2023, este martes, en el cual se analiza el desempeño y la evolución del sector en El Salvador.
La Presidenta de la asociación, Carmen Estela Pérez, se refirió a la importancia de la investigación y el desarrollo dentro de la industria farmacéutica, en la cual el país brinda sus aportes en diversas áreas.
“Eso no nos deja afuera a nosotros como industria farmacéutica nacional, porque en El Salvador se hacen medicamentos de desarrollo local, se crean medicamentos de desarrollo local, ¿esto qué es? son los medicamentos hechos por salvadoreños en El Salvador para atender nuestro perfil epidemiológico para lo cual necesitamos investigación y desarrollo adentro de las plantas farmacéuticas”, indicó, durante la entrevista Frente a Frente.
Pérez detalló que durante la pandemia por COVID-19, se requería de fármacos como la vitamina C, vitamina D y Zinc, pero a pesar de no obtener dichos productos de otros países, no existió desabastecimiento, puesto que se fabricaron en la región salvadoreña.
Con base en el estudio, señaló que “$2.2 millones de dólares están destinados a investigación y desarrollo de nuevos productos, para poder suplir la necesidad del perfil epidemiológico de nuestro país”.
La titular de INQUIFAR destacó que se percibe una mejora en la industria farmacéutica en El Salvador, puesto que se están realizando nuevas inversiones, fabricando nuevos productos y se están incursionando en nuevas líneas, además, se fabrican productos esenciales, como las mascarillas, dentro del país.
Según el informe, dentro del sector, se registró una generación de 6,522 empleos para el 2022, lo que representa un incremento, en contraste con el 2021, cuando se contrataron alrededor de 6,300 empleados. Asimismo, también existe un incremento en el salario promedio mensual, dijo Pérez.
“Para las plantas no estamos contratando a cualquier tipo de colaborador. En las plantas y en la industria se está contratando gente capacitada; y si no, pues, se toma y se le dan las capacidades y las actitudes que se necesita, porque esta industria es altamente dignificada, es la industria más regulada en el mundo. La industria farmacéutica, por estar relacionada a la salud, sus regulaciones son altísimas desde antes de que usted va a entrar a una planta, mientras usted está en la planta, y al salir de la planta”, destacó.
