Por: DW
Australia, Canadá y Nueva Zelanda pidieron el jueves un «alto el fuego humanitario inmediato» en Gaza, según una declaración conjunta suscrita en respuesta a los informes sobre la operación militar prevista por Israel en Rafah, zona sur de la Franja.
«Estamos muy preocupados por los indicios de que Israel está planeando una ofensiva terrestre en Rafah, una operación militar militar en Rafah sería catastrófica. Unos 1,5 millones de palestinos se refugian en esta zona», afirma el comunicado conjunto de los primeros ministros Antony Albanese (Australia), Justin Trudeau (Canadá) y Christopher Luxon (Nueva Zelanda).
«Una operación militar expandida sería devastadora. Urgimos al gobierno de Israel no tomar este camino. Simplemente no hay otro lugar adonde los civiles pueden ir», agrega el texto. «Urge un alto el fuego humanitario inmediato», subraya.
El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu confirmó el miércoles que seguirá adelante con la ofensiva contra el movimiento terrorista Hamás en Rafah, el último refugio de los palestinos desplazados en el sur de Gaza, después de permitir que los civiles desalojen la zona.
La declaración tripartita exhorta al gobierno de Israel a no llevar a cabo la ofensiva, aunque señala que un alto el fuego no puede ser «unilateral» e insta a Hamás a desarmarse y a liberar inmediatamente a todos los rehenes aún bajo su poder.
Los líderes también afirman que la sentencia emitida en enero pasado por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en una denuncia por «genocidio» presentada por Sudáfrica, obliga a Israel a proteger a los civiles y a prestarles servicios básicos y asistencia humanitaria esencial.
«La protección de los civiles es primordial y constituye un requisito del derecho internacional humanitario», afirma la declaración. «No se puede hacer pagar a los civiles palestinos el precio de derrotar a Hamás», concluye.