Por Redacción YSKL
En el 2024, se han registrado un total de 132,966 casos de dengue en la subregión del Istmo Centroamericano y México, con una tasa de incidencia acumulada de 72 casos por cada 100,000 habitantes.
Según el último informe epidemiológico de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), todos los serotipos del virus del dengue están presentes en la subregión, con la circulación simultánea de todos ellos en varios países, incluyendo a Costa Rica, Guatemala, Honduras, México y Panamá. En El Salvador, circulan los serotipos DENV1, DENV2 y DENV3.
En comparación con otros países de la región, se destaca el significativo aumento en el número de casos de dengue en Guatemala, Honduras, México y Panamá en 2024 en comparación con años anteriores.
México reportó el mayor número de casos con 65,758, seguido de Honduras con 20,563. En términos de tasas de incidencia acumulada, Nicaragua registró la más alta con 259 casos por cada 100,000 habitantes, seguido por Honduras, Costa Rica, Panamá y Belice.
En cuanto a la gravedad de los casos, se reportaron 724 casos de dengue grave y 48 defunciones en la subregión hasta la semana epidemiológica 19 de 2024, con México y Honduras siendo los países más afectados en este aspecto.
Ante esta situación, la OPS/OMS instó a los Estados Miembros a implementar medidas efectivas de prevención y control del Aedes aegypti, vector responsable de la transmisión del dengue.
Estas medidas incluyen la selección de métodos de control basados en el conocimiento de la biología del vector, la utilización de intervenciones múltiples, la colaboración intersectorial, el fortalecimiento del marco legal y la participación activa de la comunidad.
También se indicó que es fundamental fortalecer las acciones de ordenamiento ambiental para eliminar los criaderos del vector, reorganizar los servicios de recolección de residuos sólidos, aplicar medidas para el control de criaderos y definir áreas de alto riesgo de transmisión.
Asimismo, se recomendó la implementación de medidas específicas en áreas donde se detecte transmisión activa, como la eliminación de mosquitos adultos infectados mediante el rociado residual en interiores.
La entidad recalcó que es imperativo que los países de la subregión del Istmo Centroamericano y México intensifiquen sus esfuerzos en la prevención y control del dengue, adoptando estrategias integrales y coordinadas para reducir la incidencia de la enfermedad y proteger la salud de la población.
