Por: VOA
El Ejército israelí anunció el martes el lanzamiento de operaciones terrestres en el suroeste del Líbano, lo que marca una expansión de su incursión que, según funcionarios israelíes, tiene como objetivo hacer retroceder a los militantes de Hezbolá de la frontera.
Al igual que con sus operaciones terrestres iniciales en el Líbano que comenzaron el 30 de septiembre, el Ejército israelí describió los nuevos esfuerzos como «operaciones limitadas, localizadas y específicas».
La campaña terrestre acompaña a una ofensiva aérea generalizada, que ha incluido ataques aéreos en la capital del Líbano, Beirut, así como en áreas del sur y el este del Líbano.
El Ejército israelí dijo el martes que uno de esos ataques aéreos mató a un alto comandante de Hezbolá, Suhail Husseini, que estaba involucrado en la transferencia de armas desde Irán al grupo militante con base en el Líbano.
El ataque se produjo 10 días después de que un ataque israelí matara al líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, en medio de una rápida ampliación de la campaña militar de Israel en el Líbano.
El conflicto ha llevado a numerosos gobiernos a evacuar a sus ciudadanos del Líbano. Turquía dijo que enviará dos barcos de la marina a Beirut para evacuar a 2.000 de sus ciudadanos a partir del miércoles.
Estados Unidos dijo el martes que dos vuelos facilitados por el Departamento de Estado evacuaron a 180 personas de Beirut a Estambul.
El lunes por la noche, las Fuerzas de Defensa de Israel emitieron advertencias a los pescadores y otras personas en el área del río Awali del Líbano, prohibiéndoles el acceso a la playa y al mar en esa zona y al sur de ella «hasta nuevo aviso». El río desemboca en el Mediterráneo cerca de la ciudad sureña de Sidón.
Aniversario sombrío
Mientras tanto, los israelíes celebraron ceremonias sombrías para conmemorar el aniversario del ataque terrorista de Hamas del 7 de octubre de 2023.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo el lunes que Israel fue “lanzado a una batalla crítica, pero no fue derrotado” el 7 de octubre.
“Nos unimos para defender nuestro país, nuestra patria. Reunimos una fuerza mental inmensa”, dijo. “Definimos los objetivos de la guerra y los estamos logrando: derrocar el gobierno de Hamás; traer a casa a todos los rehenes, tanto vivos como muertos. Esta es una misión sagrada y no nos detendremos hasta completarla; eliminar cualquier amenaza futura de Gaza a Israel; y devolver a los residentes del sur y el norte a salvo a sus hogares”.
En Washington, la Casa Blanca dijo que el presidente Joe Biden habló con el presidente israelí Isaac Herzog para ofrecer sus condolencias. Él y la primera dama Jill Biden conmemoraron el aniversario con una vela conmemorativa encendida con un rabino en la Casa Blanca.
Biden dijo en un comunicado que el 7 de octubre será recordado “como un día oscuro para el pueblo palestino debido al conflicto que Hamás desató ese día”.
“No dejaremos de trabajar para lograr un acuerdo de alto el fuego en Gaza que devuelva a los rehenes a casa, permita un aumento de la ayuda humanitaria para aliviar el sufrimiento sobre el terreno, garantice la seguridad de Israel y ponga fin a esta guerra”, dijo Biden.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, dijo el lunes que Israel garantizará que su gente pueda regresar a salvo a casa y que se hará todo lo posible para garantizar el regreso de los rehenes retenidos en Gaza.
“Hoy más que nunca, tenemos el profundo compromiso de seguir tomando todas las medidas necesarias para derrotar a nuestros enemigos y defender nuestra patria”, dijo Gallant en un comunicado.
En una declaración en video, el Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, instó a aferrarse a la esperanza en medio del derramamiento de sangre y la división.
“Es hora de liberar a los rehenes. Es hora de silenciar las armas. Es hora de detener el sufrimiento que ha envuelto a la región. Es hora de la paz, el derecho internacional y la justicia”, dijo. “Las Naciones Unidas están totalmente comprometidas con el logro de esos objetivos”.
En la ONU, el embajador israelí Danny Danon encabezó una conmemoración por las víctimas del 7 de octubre a la que asistieron diplomáticos y miembros de la comunidad judía.
“Esta guerra nos fue impuesta, pero estamos dispuestos a pagar el precio”, dijo Danon. “Estamos dispuestos a hacer lo que debemos, independientemente de las condenas, independientemente de los prejuicios”.
Ese número ha sido alto. Las Fuerzas de Defensa de Israel dijeron el lunes que 728 soldados han muerto desde el 7 de octubre en Gaza y ahora en el Líbano. Más de 4.500 han resultado heridos.
Los militantes liderados por Hamás mataron a unas 1.200 personas en su ataque del 7 de octubre de 2023 en el sur de Israel. También tomaron como rehenes a unas 250 personas, de las cuales unas 100 siguen retenidas y se cree que alrededor de un tercio están muertas.
La campaña militar israelí de ataques aéreos y terrestres ha matado a casi 42.000 palestinos y ha herido a más de 97.000, según el Ministerio de Salud de Gaza. El ministerio no diferencia entre militantes y civiles, pero ha dicho que poco más de la mitad eran mujeres y niños.
Tanto Hamás como Hezbolá han sido designados como organizaciones terroristas por Estados Unidos, el Reino Unido, la Unión Europea y otros.
