El epicentro del COVID-19, Wuhan, China. Informo este lunes de un rebrote de infecciones desde que se levantara el confinamiento de la ciudad hace un mes, lo que alimenta la preocupación.
Las nuevas infecciones son una llamada a la prudencia en medio de la desescalada de las restricciones en toda China, que ha supuesto que las empresas reanuden su actividad y los trabajadores vuelvan a sus puestos.
Wuhan informó de cinco nuevos casos confirmados, todos ellos en el mismo complejo residencial. Uno de ellos era la esposa de un paciente de 89 años de edad que había sido notificado un día antes, lo que había supuesto el primer caso confirmado en la ciudad en más de un mes.
«En la actualidad, la tarea de prevención y control de epidemias en la ciudad sigue siendo muy ardua», dijo la autoridad sanitaria de Wuhan en un comunicado. «Debemos contener decididamente el riesgo de un rebote».
Todos los últimos casos confirmados fueron clasificados anteriormente como asintomáticos, personas que dan positivo en las pruebas del virus y son capaces de infectar a otros pero no muestran signos clínicos como fiebre.
El número de casos asintomáticos en China se desconoce, ya que sólo aparecen en el radar de las autoridades de salud cuando dan positivo en las pruebas de coronavirus realizadas como parte de revisiones sanitarias a personas que estuvieron en contacto con pacientes de COVID-19.
China no incluye los casos asintomáticos en su recuento total de casos confirmados, que actualmente ascienden a 82.918, hasta que muestran síntomas de infección.
El gobierno dijo el viernes que los cines, los museos y otros centros de eventos públicos empezarán a reabrir gradualmente, aunque las restricciones implican reservas obligatorias y un límite en la cantidad de visitantes.
Fuente: Reuters.
