“Ayer cerraron una fábrica de la que yo ya no tengo nada que ver, es una empresa americana, llegó la policía y fuerte elemento militar diciendo que por órdenes de arriba había que cerrar”, reveló Javier Simán este viernes, luego del cierre de la fábrica INTRADESA S.A de C.V, la noche de este jueves
Según el empresario, la textilera contaba con la autorización del Ministerio de Salud y Trabajo para operar y fabricar mascarillas y gabachas médicas para el país y para exportación; «de hecho, recientemente hizo una donación al propio Gobierno».
“Lo hemos visto en otro tipo de empresas, por eso hacemos un llamado al Gobierno, para eso están las instancias adecuadas, pareciera que no fue instrucción del Ministerio de Trabajo. Este tipo de decisiones arbitrarias no harán sacar al país adelante”.
Simán señala que aunque parte de sus familiares son los dueños de la empresa, él no tiene vínculos con la dirigencia desde hace cinco años.
La compañía dedicada al sector textil y confección, se encuentra ubicada en Soyapango sobre el Boulevard del Ejército.
El Ministro de Trabajo, Rolando Castro, se pronunció ante estas declaraciones y señaló que el cierre se efectuó bajo el debido proceso, «solo estamos protegiendo la salud de los trabajadores y del pueblo salvadoreño».
