30 acusados en el caso conocido como Operación Escudo Regional pasarán a juicio por los delitos de actos de terrorismo, agrupaciones ilícitas, robo vehículos, homicidios, extorsiones, así como lavado de dinero y activos.
La decisión fue tomada por el El Juzgado Especializado de Instrucción “B” de San Salvador.
Entre los imputados se encuentra un exagente de la Policía Nacional Civil (PNC) acusado de vender armas a las pandillas, según los datos del proceso, daba información a los miembros de pandillas sobre algunos operativos policiales para que estos pudieran darse a la fuga.
Asimismo, comerciantes y abogados están ligados a la acusación de la Fiscalía General de la República (FGR), ya que informaban a la estructura pandilleril de testigos de los casos para que procedieran a atentar contra sus vidas.
Los imputados operaban en San Salvador, San Miguel, Santa Ana, Chalatenango y Ahuachapán, la investigación concretó a los participantes de los hechos delictivos a través de intervenciones de llamadas telefónicas, por lo que las capturas se realizaron en mayo de 2019.
En este caso también se sobreseyó a 12 implicados, cinco de forma definiitva y siete provisionalmente, pues la jueza consideró que las pruebas de la Fiscalía no fueron suficientes para dar indicios de la participación en los delitos; entre estos se encuentra un abogado y un médico que supuestamente colaboraban a las pandillas.