Por: Redacción YSKL
Con motivo de los 2 años de Gobierno del Presidente Nayib Bukele, el Instituto Universitario de Opinión Pública (IUDOP), de la Universidad Centroamericana, UCA, realizó un estudio para conocer las perspectivas de la población de la gestión actual.
La investigación se realizó entre el 15 al 24 de mayo del 2021, se liberaron 1,275 encuestas en la zona urbana y rural, a hombres y mujeres mayores de 18 años.
Uno de los puntos que evaluó esta casa de estudios, fue la opinión ciudadana sobre aspectos de la democracia y Estado de Derecho, específicamente los que han acontecido en los últimos doce meses.
Según recaba el estudio, el 75.8% de la población está “De Acuerdo” en que en una democracia “las personas tienen derecho a participar en huelgas y protestas”. Mientras que, el 94.6% de los encuestados estaba también a favor de que, aunque el Gobierno sea mayoría en la Asamblea y apoyado por la sociedad, debe escuchar y dialogar con distintos actores sociales.
Otra de las frases que obtuvo más del 90% de aceptación, fue que la opinión de las minorías es tan importante como de las mayorías.
El 96,8% de la población encuestada, también afirma que aunque “una persona haya sido elegida por el pueblo para un cargo público, la población debe exigirle que en su gestión cumpla las leyes y la constitución”. 9 de cada 10 salvadoreños están a favor de la premisa, según el IUDOP.
En cuanto a hacer uso del derecho a la libre expresión, “ya sea que apoyen o critiquen las decisiones que se están tomando”, el 95.8% consideró que está de acuerdo.
Otro punto que fue evaluado por la UCA es la posibilidad que funcionarios de la actual administración contraten personas cercanas como amigos y familiares que trabajen con él. Esto fue rechazado: Si se hace la sumatoria entre los que están “en desacuerdo” con los que están “muy en desacuerdo”, la suma asciende a 76.5%, aproximadamente 8 de cada 10 salvadoreños.
En lo que atañe al Órgano Judicial y las sentencias que promulga la Sala de lo Constitucional, el 91.3% de los salvadoreños (9 de cada 10), estima que están de acuerdo con esta valoración y que todos, incluso el Presidente y los Diputados, deben acatar las resoluciones.
La importancia de la Constitución fue valorada en el estudio: El 94.5% expuso que es importante. Le sigue una sumatoria de 1.5% de población que desmerita la validez de la Carta Magna.
A pesar que en este apartado la población se mostró más a favor de la continuidad de una política de respeto a la democracia y las leyes. un 87.5% de la población estudiada consideró que hay un “cambio positivo” con el Gobierno Bukele. Un 7.5% dijo que hubo un “cambio negativo”. Asimismo, un 3.8% señaló que “más de lo mismo” y un margen de 1.3% dijo que “no sabe” o “no responde.
Ante la pregunta “¿Cree usted que su Gobierno está haciendo bien las cosas o que las está haciendo mal?”, el resultado fue del 79.8% que se mostraron a favor que se estaban “haciendo bien las cosas”.
Le sigue un 9.8% de gente que evalúa como “regular” la gestión. Si se compara 2021 con 2020, en cuanto al resultado, este aumentó 14%, es decir, el porcentaje del año pasado llegó a 65.7%.
Para Omar Serrano, Vicerrector de Proyección Social de la UCA, desde que Nuevas Ideas obtuvo la mayoría absoluta en la Asamblea Legislativa, «ha desaparecido la pluralidad», pues los partidos de oposición, no han logrado concretar propuestas sólidas que se concatenen con las necesidades de la población.
En cuanto al estudio en cuestión, afirmó que «hay un divorcio», entre los principios democráticos teóricos y la realidad fáctica. «Prácticamente en todas las preguntas que tienen que ver con principios de democracia, 9 de cada 10 los apoya (…) sin embargo, cuando preguntamos por la gestión específica del Gobierno, la mayoría lo apoya, ha mejorado la imagen, incluso la nota con el año anterior», matizó Serrano.
Según el académico, «El Salvador es una casa, que está corroída, y se intenta cambiar desde cero, botándola, lo que se hace, es que se ponen otros capataces, pero la finca es la misma, esto hace que haya tolerancia de la gente, que no tiene que ver con la democracia, si se construye algo nuevo, la gente está de acuerdo».
