La Cámara Primera de lo Penal de la Primera Sección del Centro instaló hoy la audiencia preliminar contra el General José Atilio Benítez Parada acusado por los delitos de actos arbitrarios, peculado, falsedad ideológica, estafa comercio ilegal y depósito de armas; hechos que supuestamente cometió cuando fungió como exviceministro de Defensa Nacional.
En la audiencia preliminar, la Fiscalía General de la República (FGR) expuso cada uno de los 15 casos por los que está siendo procesado el General Benítez y solicitó a los Magistrados de la Cámara, que le sea admitida los elementos de prueba tanto documental, pericial y testimonial, entre éstos se encuentran las supuestas víctimas de las estafas, peritos policiales y el testigo criteriado coronel Salvador González Quezada., quien se desempeñó en la Dirección de Logística de la Fuerza Armada de El Salvador.
Por su parte la defensa del imputado, consideran que no existen elementos de prueba vinculantes con su defendido, consideraron que ha sido una “investigación parcializada” por lo que solicitaron un sobreseimiento definitivo.
Por su parte, el acusado Benítez pidió a los Magistrados le admitan como testigo al Mayor Rafael Monterrosa, quien era ayudante del general.
Mientras tanto en el derecho de la defensa material, el General Benítez dijo: “Dios me ayudará a demostrar mi inocencia… y les solicito que hagan valoración de los hechos y emitan resolución justa”, enfatizó.
Uno de los magistrados manifestó a las partes que en las próximas horas se dará a conocer la resolución “hay necesidad de analizar las peticiones y calificaciones respectivas… hay muchos aspectos que tomar en cuenta”, dijo.
La FGR ha presentado al testigo criteriado quien señaló que en 2009 hubo un Decreto #25, con una vigencia de 45 días para que todos los civiles que tuvieran arma de fuego en su poder las pudieran registrar. Sin embargo en el 2010, mientras el testigo fungió como Director de Logística del Ministerio de la Defensa Nacional, registró varias armas de fuego de uso privativo de la Fuerza Armada, a nombre de él, “pero por órdenes dadas por su jefe inmediato, Benítez Parada”, dijo el testigo.
González Quezada relató además que el General Benítez “le dijo que ya tenía demasiadas armas a su nombre y que no quería seguir registrándolas a su nombre, porque él se iría del país como Embajador de Alemania y que no quería dejarle ese cargo a su familia, además que buscara compradores para las mismas y que posterior a la venta, le fuese entregado el dinero”, señaló el testigo.
Entre las armas, que Benítez Parada supuestamente entregó al testigo se encuentra un Fusil AK 47, quien según su dicho fue matriculada para ser entregada al entonces Ministro de Justicia y Seguridad, Manuel Melgar.
El testigo dijo que todas las armas que él registro fueron de manera ilegal, debido a que no contaban con la documentación requerida para inscribirlas y que la declaración jurada que se hacía opera cada equipo, también eran falsas.
