La participación del testigo criteriado con clave Noé continúa en el Juzgado Especializado de Sentencia A de San Salvador, donde se desarrolla el juicio contra 426 miembros de la estructura criminal (MS-13) en el caso denominado «Operación Cuscatlán».
El testigo mencionó este jueves, el modus operandi que utilizaban las pandillas transnacionales para traficar droga de una región a otra para posteriormente venderla. El fiscal del caso determinó que estas estructuras tenían comunicación con los Zetas de México, para “potenciar sus recursos”.
Asimismo reveló la manera de cómo obtuvieron fusiles AK47, de un oficial de la Fuerza Armada en el año 2015, entre otras, para fortalecer los pilares de las estructuras y dominar en sus territorios.
MS compró cuatro M-60 a un oficial del Estado Mayor.
La MS –dijo Noé- lograban ganancias por varias actividades tanto lícitas como ilíticas: desde 2012 a 2013, obtuvieron $20 mil mediante la cosecha de café; $20 mil dólares, en venta de droga; $10 mil dólares mensuales en venta de hortalizas y $3,500 dólares en granjas de pollo.
El fiscal del caso no determinó si los terrenos donde los miembros de la mara (MS-13) utilizan para la cosecha de café eran rentados, usurpados o de su propiedad.
También le preguntamos al fiscal del caso, si en los próximos días estaría finalizando la participación del testigo: “El estado de Salud de Noé ya está bien, para continuar con esta faena, pero si tiene pequeños remanentes pero no es nada grave, la participación de él aún continuará porque hemos partido de lo general a lo específico”, puntualizó.
El testigo es uno más del grupo de diez criteriados que ha preparado el Ministerio Público para individualizar los delitos para 426 pandilleros detenidos en el marco de la Operación Cuscatlán.
Los 426 pandilleros son acusados por agrupaciones ilícitas, organizaciones terroristas, proposición y conspiración en el delito de homicidio Agravado.
