El Diputado Norman Quijano, fue abordado por la prensa, luego que el Juzgado Especializado de Sentencia, ordenó revelar los videos donde aparece el político con pandillas, antes de las elecciones presidenciales del 2014.
En sus declaraciones, el legislador señaló que en esa fecha asistió a una reunión, organizada por el Presidente de la Red Local de Pastores Nelson Valdez, “cuando uno es candidato a presidente asiste a miles de reuniones (…) uno va a cientos de reuniones, yo veré si reviso con la agencia que manejaba la publicidad para ver si ellos me acompañaron porque si fue en la campaña presidencial ya lo pongo en duda; ahí dice 17 de Enero, vean el cintillo”, justificó.
El funcionario sostuvo que no se reunió con pandilleros y que lo que consta en los videos, fue parte de un encuentro con pastores; en ese contexto, argumentó que probablemente los sujetos se infiltraron en la cita. ”No nos deberíamos de extrañar tampoco, porque en el país hay un promedio de medio millón de salvadoreños que ya sea que sus parientes andan involucrados con pandillas”.
Quijano afirmó que se trata de “una conjura” que proviene desde Casa Presidencial, ‘desde el primer día (dije) que era una infamia ¿no les parece raro que cuando el señor [Walter] Araujo, tres días antes de que este señor (Noé) hablara de mi persona, amenazó que iba a haber un golpe?’. “Esta es una conjura y viene de Casa Presidencial”, añadió.
De acuerdo con el testigo criteriado de la Operación Cuscatlán, con clave Noé, nombró a Quijano en las reuniones y afirmó que tenía en su poder el material audiovisual donde se aprecia al excandidato presidencial, hablando con los terroristas, que fue develado en audiencia por el Juez Godofredo Salazar.
