Autoridades del Ministerio de Trabajo y de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP) y sector laboral, todos agremiados al Consejo Superior de Trabajo (CST) acudieron a la Asamblea Legislativa, para presentar una solicitud de prórroga a la entrada en vigencia de la Ley Especial para la Regulación e Instalación de Salas Cunas para los Hijos de los Trabajadores.
Según explicó el Ministro Rolando Castro, solicitaron a los Diputados seis meses, para que las empresas instalen un salón con cunas en las empresas. La moción fue apoyada por los parlamentarios de las fracciones de ARENA, GANA y PCN.
«Lo que queremos es que esto se vea con un enfoque de país y no politizado porque el reglamento nunca se elaboró», reveló el funcionario.
La Ley entra en vigencia el 1 de junio, pero el Consejo Superior del Trabajo ha pedido medio año porque la Ministra anterior, Sandra Guevara, no elaboró el reglamento, “ni tan siquiera propuso corregir varios vacíos de la normativa”, enfatizó Castro.
«Ni el Gobierno, ni el sector empleador o el trabajador están pensando en evadir su responsabilidad, lo que queremos es hacerlo bien y que sea sostenible y positivo», remarcó.
El funcionario sostuvo que el Gobierno elaborará el reglamento, con conocimiento del CST; «No partimos de cero, en Presidencia ya hay un esfuerzo”.
Por el momento, la Ley no estipula aspectos claves, como el tamaño del espacio físico de las salas cuna, ni tampoco el grado de conocimiento del personal que las atenderá (para el caso de niños con discapacidad); además aún no está definido cómo los empresarios costearán los espacios, y tampoco se conoce cómo el Gobierno se ha preparado para ofrecer el beneficio.
La ley se promulgó tras una sentencia de la Sala de lo Constitucional en 2017; donde se ordenó que antes del 31 de mayo de 2018, el Congreso aprobara una legislación para los hijos de los trabajadores, esto con base al artículo 42, inciso 2 de la Constitución.
El beneficio entra para aquellas empresas o entidad pública con 100 o más empleados permanentes o temporales, y para los niños de entre cero y tres años de edad. Según el decreto, para sufragar los gastos de construcción y equipamiento, los empresarios tendrán deducción de impuesto sobre la renta.
Las empresas podrán optar por tres opciones: instalar una sala cuna propia, asociarse con otra empresa y tener cunas comunes o contratar servicios independientes; sobre este último, no está claro la distancia de la sala cuna de la empresa y tampoco el monto límite que puede llegar a cobrarles al patrono.
Si la Asamblea avala la prórroga, el Estado tendrá diez meses para elaborar el reglamento.
