Diputados dictaminan declarar zona de Interés Cultural el asentamiento prehispánico ubicado en una quebrada entre Tonacatepeque y Soyapango

Foto: Cortesía.

La Comisión de Cultura y Educación dictaminó las Disposiciones Transitorias para declarar como zona de Interés Cultural el asentamiento prehispánico ubicado bajo la ceniza de la erupción del volcán de Ilopango.

El asentamientose encuentra entre Tonacatepeque y Soyapango, en la quebrada Pacún, un brazo que conecta con el río Las Cañas.

El caso se hizo viral en Tiktok, donde el profesor Miguel Ángel Sales dio a conocer el hallazgo por trabajadores agrícolas del lugar.

Fueron las recientes lluvias que dejaron al descubierto parte del asentamiento que fue cubierto por la ceniza del volcán de Ilopango.

El artículo 51 de la Ley Especial de Protección al Patrimonio Cultural de El Salvador establece que es competencia del Órgano Legislativo reconocer por decreto la calidad de Monumento Nacional, la de Centro Histórico, Área, Zona, Sitio, Lugar, Conjunto Cultural o Histórico en el país.

Según los diputados, la declaratoria del lugar como zona de interés cultural permitirá que el Ministerio de Cultura realice los estudios, investigaciones, recolección y registro de datos para poder delimitar la extensión del asentamiento y su área de protección, a fin de registrar un nuevo sitio que pase a formar parte de la identidad arqueológica de El Salvador.

¿Qué medidas tomará Cultura? 

Según la Cultura, estas son las acciones que se prevén:

  • Levantamiento topográfico del área.
  • Acordonamiento y eliminación del acceso de camiones de carga y personas.
  • Seguridad coordinada con las autoridades de la zona para evitar saqueos.
  • Verificar la forma de proteger el sitio de la humedad que provoca la lluvia y su proximidad con la ribera del río y la quebrada.

El 13 de septiembre pasado, tras una semana de su hallazgo y que se conociera por la red social, la Dirección Nacional de Patrimonio Cultural proclamó el hallazgo prehispánico como terreno de Interés Cultural.

El hallazgo

Las primeras inspecciones en el lugar han permitido identificar material cerámico disperso en toda el área, el cual permite datar de forma preliminar el sitio en el periodo Clásico temprano (400 al 600 d. C.), ya que entre los fragmentos recolectados se ha identificado uno correspondiente al grupo Chilanga, ya estudiado por hallazgos anteriores en el sitio arqueológico Tazumal, Chalchuapa.

De igual manera, se han identificado inicialmente tres plataformas rectangulares construidas con tierra y todo parece indicar que hay más. Eso implicaría que se trataba de un asentamiento y que los vestigios dan pautas para pensar en la vida cotidiana de ese periodo.

Asimismo, en el lugar se ha encontrado una gran acumulación de maíz carbonizado, el cual fue resguardado en algún tipo de depósito construido de madera, convirtiéndose en un testimonio de la dieta de los antiguos pobladores.  

Sin embargo, toda esa riqueza se localiza geográficamente en una zona muy vulnerable debido a la inestabilidad de los taludes de ceniza, que siguen lavándose con las lluvias y pueden dejar expuesto lo que aún se encuentra sepultado del asentamiento, ya que el agua fluye con fuerza a lo largo de la quebrada.