Estudio indica que modalidad virtual ayudó a desarrollar capacidades autodidactas, pero implicó dificultades en la concentración de los universitarios

Imagen de referencia.

Por Redacción YSKL

El Observatorio de Políticas Públicas y la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Francisco Gavidia (UFG) realizaron un foro para exponer los resultados de su encuesta sobre los efectos de la pandemia COVID-19 en la educación superior.

Según el investigador del observatorio, Walter Iraheta, entre los resultados se encuentran ventajas y desventajas que implicó la educación en la modalidad virtual.

“La pandemia por COVID-19 generó una cuarentena que obligó a las universidades a transitar a los medios virtuales para el desarrollo de las clases. Sin embargo, hubo aspectos positivos y negativos”, dijo el experto.

Iraheta señaló que los factores que perjudicaron, están fuera de las manos de las universidades, pero tienen un impacto negativo.

El estudio también determinó que “adaptarse a la modalidad virtual” es el principal reto que han afrontado los universitarios, en el desarrollo de sus clases en dicha modalidad; seguido por la “insuficiente calidad del internet” y lidiar con el “estrés por la pandemia”.

En el caso de los catedráticos, indican que “la distracción y el aburrimiento de estudiantes” fue el mayor reto que implicó la nueva dinámica de estudio; y también indicaron tener problemas en el proceso de adaptación; otra dificultad fue “estudiantes poco familiarizados con las plataformas virtuales”.

Por otro lado, el especialista remarcó que hubo beneficios en cuanto al nuevo mecanismo, como el desarrollo de capacidades autodidactas y un mejor manejo de plataformas y herramientas digitales.

“Los aspectos positivos que podemos mencionar es, en sí, que la comunidad universitaria haya transitado a los medios digitales; eso es un aspecto positivo. Además, de que los estudiantes ahora pueden desarrollar, bajo esas plataformas, habilidades más autodidactas, es decir, que pueden llegar a asumir un mayor protagonismo en su proceso formativo”, agregó Iraheta.

La investigación que abarca el período entre septiembre de 2022 y febrero de 2023, y comprende nueve universidades que pertenecen a la Asociación de Universidades Privadas de El Salvador. Los resultados provienen de un total de 975 estudiantes y 390 docentes encuestados.