Organizaciones de mujeres rechazan anulación de sentencia en caso de feminicidio de Edi Marcela Pérez cometido por su ex pareja

Por: Redacción YSKL

Rodrigo Alfredo Pérez González, condenado por el feminicidio agravado de su esposa Edi Marcela Pérez el 19 de noviembre de 2016, volverá a enfrentar el proceso penal, luego de que la Sala de lo Penal de la Corte Suprema de Justicia, ordenó a un Juzgado Especializado para una Vida Libre de Violencia hacia las Mujeres, abrir un nuevo juicio.

Al respecto, la Asamblea Feminista calificó como arbitraria la resolución en vista que la Sala no tomó en cuenta que la víctima dejó en la orfandad a una menor de ocho años y que todo el desfile probatorio determinó que el sujeto fue el principal autor del crimen.

«Llama la atención que en la Sala, la Magistrada Sandra Luz Chicas, habla de la necesidad que hay de normar y respetar la ley. Esta Magistrada ha dicho que es necesario incluso revisar la ley por la impunidad a crímenes contra las mujeres y feminicidios y aquí es lo contrario, emiten sentencias que representan un retroceso para la protección de los derechos», señaló Keyla Cáceres, representante de la Asamblea.

En 2021, Pérez González recibió una condena de 35 años de prisión por el delito de Feminicidio Agravado. Los hechos ocurrieron cuando el imputado trasladó a la víctima a su casa en colonia San Patricio, San Salvador, donde le quitó la vida.

La sentencia fue impuesta por el Juzgado Especializado de Sentencia para una Vida Libre de Violencia para la Mujer de San Salvador, que entregó la resolución el viernes 12 de noviembre del año mencionado.

En dicha resolución se decretaba que el hijo de la pareja pasaría a custodia de la familia de la madre. La familia teme que con la repetición del juicio, la menor pase a custodia del grupo familiar paterno.

«La menor podría perder su garantía jurídica. Nos llama la atención que en este contexto, tantos casos sin sentencia y narrativas gubernamentales de negar los feminicidios en este país, abran un caso para una nueva sentencia, para la familia no será fácil sobrellevar el proceso y que aún no termine. No queremos dejar a la familia sola y a la niña que pase a manos de la familia del feminicida y que sea otro caso de impunidad», manifestó Cáceres.

Edi murió el 19 de Noviembre del 2016, según quedó establecido en el primer juicio, la víctima asistiría a una boda de la cual era dama de honor, pero no llegó a la ceremonia. Esa misma noche fue encontrada muerta en el Boulevard Órden de Malta de Santa Elena, Antiguo Cuscatlán.

El informe de Medicina Legal, concluyó que murió por un golpe en la cabeza; las investigaciones de la Fiscalía señalaron que el ex esposo la secuestró, llevándosela a su casa donde sucedió el delito.

Edi dejó huérfana a una niña de ocho años cuya custodia había ganado en el 2013, luego de que se divorciara. “La muerte de la víctima es precedida de múltiples episodios de violencia física y emocional, control y posesión de parte del imputado”, dijo la fuente fiscal.

El arresto del sujeto se efectuó en la Frontera El Amatillo, cuando regresaba de Honduras. En un primer momento Medicina Legal hizo el levantamiento del cuerpo de la jóven días después del hecho, pero el asesino fingió no reconocer el cuerpo, posteriormente huyó del país.