Por Redacción YSKL
Comunidades indígenas se pronunciaron este miércoles tras la decisión de la Cámara Ambiental de archivar el caso Sensunapán, el cual está relacionado a la construcción de la «Pequeña Central Hidroeléctrica Nuevo Nahuizalco», en las orillas del Río Sensunapán, situado entre los municipios de Nahuizalco y Sonzacate.
Según dieron a conocer miembros de organizaciones ambientales, la resolución se dio tras las reformas a la Ley de la Carrera Judicial que purgó a 244 jueces en el 2021. Lo que provocó que los jueces nombrados posteriormente retomaran el caso, que ya contaba con medidas cautelares, las cuales fueron postergándose, hasta que la Cámara Ambiental sentenció que ya se habían cumplido las mismas.
«Deja en evidencia que se está avalando esa actitud de incumplimiento de las instituciones públicas», expresó una representante de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD), Ariela González.
Además, dijo que entre los documentos que serán archivados se encuentra la investigación de la unidad ambiental de la Corte Suprema de Justicia, el cual contiene la recomendación de personal de entidad de no entregar permiso para llevar a cabo el proyecto de construcción.
«Estamos hablando de que hay exagerada cantidad de información, suficiente para que se tome la decisión de establecer de una vez por todas la prohibición de más proyectos en la ribera del Río Sensunapán», agregó la representante.
De igual manera, se hizo referencia a lo dicho por la Ministra de Cultura, Mariemm Pleitez, en el último informe sobre la actualización de la política de nacional de pueblos indígenas, el cual expone que «la Dirección Nacional de Patrimonio Cultural recomendó que debe profundizarse más en el tema, sin embargo, no se encuentran argumentos suficientes para establecer medidas de protección para los sitios sagrados».
«Desde nuestro punto de vista, esto es una clara vulneración a los derechos de los pueblos indígenas y a la preservación del medio ambiente, que es también uno de los principales factores que nos han motivado a nosotros y a la comunidad a luchar por esta causa en contra de los proyectos hidroeléctricos en el río», alegó la miembro de FESPAD.
«Están mandando al archivo no sólo la documentación, sino todos estos años de lucha que son ya 19 años, los están mandando a una gaveta, invalidando todo el esfuerzo que nosotros hemos hecho por conservar, cuando son ellos quienes tienen la obligación. Es para nosotros incluso una actitud burlesca decir que las instituciones han cumplido con las medidas cuando nosotros hemos sido testigos de que o han hecho poco no han hecho nada, como es el caso del Ministerio de Medio Ambiente», agregó la miembro del Comité Indígena para la Defensa de los Bienes Naturales de Nahuizalco, Sofía Morán.
El Río Sensunapán ha sido un área de interés para las organizaciones ambientales e indígenas, por lo que se han manifestado por alrededor de 19 años ante propuestas de proyectos de construcción hidroeléctricos, como la Pequeña Central Hidroeléctrica Nuevo Nahuizalco II, el cual, con base en el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del año 2020, se determinó que implica un riesgo de desastre, ya que será construido en suelos que, para su uso, deberán ser cambiados de categoría.
La zona también es reconocida como patrimonio cultural, ya que en el fondo del río se ha identificado un sitio ceremonial de los pueblos originarios, y que ya está registrado en el Ministerio de Cultura.
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