Con el inicio del invierno el pico de contagiados y muertos por COVID-19 el gobierno decidió volver desde este miércoles, a la Fase 1 de cuarentena en la región metropolitana de Buenos Aires, la más poblada de ese país.
Solo tienen permisos trabajadores esenciales, se cerrarán fronteras de la zona metropolitana de Buenos Aires y habrá férreos controles al transporte. Argentina tiene 62 mil contagiados y 1 mil 280 muertos por COVID-19, pero con un bajo nivel de testeos, lo que pone en alerta a las autoridades.
Carla Vizzotti de la secretaria de Salud de la nación, advirtió que el sistema de salud está en un momento crítico. «Empezamos tres semanas de un trabajo intenso, para poder minimizar la transmisión y poder seguir dando respuestas desde el sistema de salud», dijo.
Mientras, su economía espera que se pierden 715 millones de dólares por día, desde marzo acumulan 70.000 millones de dólares y el déficit fiscal es histórico, por la cantidad de subsidios, créditos y planes sociales para contener la situación, advierten varias consultoras financieras privadas.
Comerciantes y hasta los profesionales independientes creen que esto es insostenible.
Por su parte el ministro de Transportes de esa nación, Mario Meoni, insistió que la prioridad sigue siendo el cuidado de la vida.
«La verdad es que es una situación muy compleja, la verdad es que nosotros esperamos cortar ese ciclo de crecimiento de contagio que estamos teniendo en este momento. Es difícil, pero reitero, priorizamos el cuidado de la salud y de la vida, por sobre todas las cosas».
Fuente VOA.
