Debido a que los habitantes afectados no pueden acudir a la alcaldía de Nahuizalco en Sonsonate por la falta de transporte público y evitar la propagación de COVID-19 para participar en la consulta pública para la construcción del proyecto “Pequeña Hidroeléctrica Nuevo Nahuizalco II”, en el Río Sensunapán, la Procuraduría Para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) emitió medida cautelar para que el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) suspenda esta actividad y sea reprogramada en su posterioridad.
Así también, la Procuraduría pidió al MARN la suspensión de la tramitación del proceso de autorización para la construcción hasta que el país haya superado la pandemia de COVID-19.
Las comunidades indígenas de los municipios de Sonsonate, Nahuizalco y Sonzacate destacan que este proyecto repercutirá en la flora y la fauna del ecosistema, además que dejaría sin agua a la población, pues ya son siete presas que se encuentran en la zona.
La presa aprovechará el recurso hídrico del Río Sensunapán y Grande Sonsonate, con una toma de caudal máximo de 3.7 metros cúbicos por segundo (m2/s) proyectando obtener un potencial nominal de 2.0 Megavatios (MW), en condiciones hidrológicas normales. Estimándose obtener una generación promedio anual de 12, 000,000 kwh.
Consulta Pública
El Estudio de Impacto Ambiental (EsIA) del MARN habilitó desde el 19 de junio la consulta pública en la alcaldía de Nahuizalco para que los interesados expresen si el proyecto afecta la calidad de vida de la población, riesgos a la salud y al medio ambiente, sin embargo, los cantones Sisimitepet y Pushtan (comunidades afectadas) se encuentran a cuatro kilómetros de distancia, por lo que no pueden manifestarse sobre esto.
Esta consulta terminaría este 2 de julio.
Este proyecto ya había sido rechazado en 2014 por el MARN, luego que las comunidades indígenas se manifestaron para que este no fuera permitido y no perder el acceso al agua del río, del que dependen para sus actividades diarias.
Inspección del Ministerio de Cultura
Además, la PDDH solicitó a la Ministra de Cultura, Suecy Callejas, que realice inspección donde se construirá este proyecto para identificar si constituye un daño irreversible a los sitios sagrados de los pueblos indígenas de la zona, de ser así, deberá adoptar medidas para prevenir su realización que estén bajo su competencia.
Esta inspección podrá realizarse con la participación del MARN y las comunidades indígenas.
