Declaran Noble Amigo de El Salvador al Embajador de Japón

El embajador de Japón ante El Salvador, Higuchi Kazuyoshi recibió de parte de la Asamblea Legislativa la distinción honorífica Noble Amigo de El Salvador, por su destacado trabajo en las relaciones entre ambas naciones.

Entre las muestras de la cooperación brindada por Kazuyoshi al país, se detalla una considerable cantidad de actividades destinadas a impulsar el desarrollo socioeconómico, las que se lograron a través de los diferentes programas gestionados como representante diplomático de esa nación, uno de estos en la Agencia Japonesa de Cooperación Internacional (JICA, por sus siglas en inglés).

Al diplomático nipón se le atribuye su trabajo al frente de proyectos de reconstrucción de la red vial y el desarrollo de infraestructura que ha permitido aumentar los niveles de crecimiento económico y social; y sus aportes para enfrentar desastres naturales.

Recientemente, el gobierno japonés ha otorgado el financiamiento para la edificación de El Puerto La Unión, en función del desarrollo social y económico de la zona oriental del país, ya que, en un futuro cercano, El Puerto La Unión será uno de los centros de distribución de carga de la región, y se transformará en un componente estratégico del comercio internacional, con los beneficios que de ello se originen.

“En los pasados terremotos Japón ha sido solidario en la emergencia y construcción poniendo de manifiesto la sincera hermandad que profesamos ambos pueblos, los lazos que nos unen han podido mantener un desarrollo duradero y estable”, comentó el Presidente del Congreso Mario Ponce.

 “Me siento honrado por haber podido trabajar para El Salvador, este país tiene un gran potencial, estoy convencido que El Salvador caminará en el rumbo correcto gracias al pueblo que tiene”, manifestó Kazuyoshi.

Las relaciones diplomáticas entre Japón y El Salvador fueron establecidas el 15 de febrero de 1935. Entonces, Yoshitaka Hori, Ministro de la Embajada del Japón en Mexico, presentó su Carta de Credencial al Presidente Maximiliano Hernández Martínez.

Tras la Segunda Guerra Mundial, ambos países retomaron su cordial vínculo. Así, en 1953, El Salvador fue uno de los primeros países de Occidente en abrir su mercado a productos japoneses, con la importación de sus automóviles.

De igual forma, en 1955, y gracias a la producción y exportación salvadoreña de algodón, Japón invirtió por vez primera en un país latinoamericano mediante la instalación de una empresa textil.

Durante las crisis de los desastres naturales, como El Huracán Mitch, en noviembre de 1998, y los terremotos del año 2001, la nación nipona colaboró en la reconstrucción de la infraestructura.

El Príncipe y Princesa Hitachi apoyaron a El Salvador durante la crisis provocada por la erupción del volcán Ilamatepec y la tormenta tropical Stan, en el 2005. Ante la situación, el gobierno japonés ofreció un donativo a los damnificados por la emergencia.